Joaquín Mª Aguirre (UCM)
No sé
si sería posible hacer un diccionario de la política. Por supuesto existen
diccionarios y glosarios de términos de las Ciencias de la Política, pero no me
refiero a eso. Me refiero al diccionario del día a día de la política, el que
se elaboraría recopilando lo que se dicen unos a otros, lo que le dicen a la
gente y, por supuesto, lo que la gente entiende que le han dicho.
Los
modernos enfoques de la comunicación hablan de intersecciones entre los
diccionarios y enciclopedias mentales de unos y otros, de los intervinientes en
el proceso del diálogo. Creemos que entendemos al otros, nos aproximamos... pero eso puede ser cuestión compleja.
Todo
esto me viene a la mente cuando leo el titular en RTVE.es que dice "Feijóo se
muestra abierto a dialogar con Junts, pero avisa: "Hablar sí, pero ni
chantajes ni someternos a las minorías"". Debo señalar que me ha
dejado preocupado. No entiendo lo mismo que entiende Núñez Feijóo por "mostrarse abierto", "hablar",
"chantajear" ni por "someterse". Me resultan confusos estos
términos.
¿Significa
lo mismo "hablar" para los del PP que para Junts, que son aquellos
con los que quieren hacerlo? Mucho me temo que no, porque "hablar"
para Junts supone precisamente lo que el PP no quiere, es decir,
"someterse", lo que significaría aceptar un "chantaje",
puesto que se "someterían" si quieren el poder.
¿Es
posible hablar cuando dos grupos o personas quieren decir otra cosa o con otros
resultados? Pues creo que más bien no, que es imposible, si no difícil, otras
dos palabras complicadas en el diccionario de la política.
El arte
del discurso político trata de conseguir el poder
sin que parezca que se cede a todo, que sea lo único que importa, pues parece
estar mal visto. Como cada vez son más radicales los discursos y más fuertes las
promesas resulta complicado no verse cogido por las propias afirmaciones que
se convierten en trampas posteriores. El otro es tan malo que surge la
extrañeza por eso del diálogo o la negociación con ellos. Los que estaban destinados a la lucha acaban compartiendo mesa y mantel.
En esto el PNV ha sido claro, no van a "hablar" con el PP, sino a "conocer personalmente a Núñez Feijóo", como ha señalado su portavoz, que dice no tener el gusto de conocerle. Cortesía, dice. Está claro que también van a "hablar", pero será algo diferente lo que tiene pensado cada uno de ellos.
De la misma forma ocurre con "chantajear", que para el PP significa "pedirles lo que no quieren dar" y para los de Junts "exigir lo que su electorado les pide". Lo que para unos es "negociar" para otros es "chantajear", por lo que el "diálogo" o el "encuentro" no lleva a nada definitivo.
En mitad de todo esto, los partidos lanzan sus nuevos discursos (no tan nuevos) para esta etapa del proceso. Se trata de convencer al electorado de lo que habían prometido no hacer. Tras las campañas feroces es difícil entender que todo sea negociable, que todo sea posible hablarlo, por lo que se hacen necesarias líneas rojas por todas partes por unos y otros.
Las
elecciones "casi" las han "ganado unos", pero "no las
han perdido" otros, lo que no deja de ser un eufemismo, otra figura del
lenguaje. Con un lenguaje tan enrevesado, como las operaciones de aritmética
política (otro campo complicado), no es fácil entenderse. Queda por saber, si
hay repetición electoral, cómo reaccionará el electorado con las explicaciones
que cada uno les dé.
"No somos somos Sánchez" ha dicho Núñez Feijóo para acabar de complicar esto de la semántica política. Es urgente el diccionario.
*
"Feijóo se muestra abierto a dialogar con Junts, pero avisa: "Hablar
sí, pero ni chantajes ni someternos a las minorías"" RTVE.es
27/08/2023 https://www.rtve.es/noticias/20230827/feijoo-investidura-curso-politico/2454670.shtml
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