Joaquín Mª Aguirre (UCM)
No ha
mucha información sobre lo ocurrido en la prisión de Gran Canaria, en la denominada
"Las Palmas II", pero es muy tentador usarla como metáfora social. La
información que se nos da es coincidente por repetida: el 10% de los presos no
quisieron vacunarse y se encontraban en el módulo 11; frente al 90% de presos
vacunados y la totalidad de los funcionarios.
De la cantidad de contagiados, las informaciones notifican, también de forma unánime los mismos datos. En Canarias7 se explica:
Un brote en la prisión Las Palmas II, con al
menos 76 positivos asociados, ha obligado a poner en cuarentena el centro
penitenciario ubicado en la localidad grancanaria de Juan Grande, según
confirmaron a este periódico fuentes de la Delegación del Gobierno.
Hasta ayer se había identificado a un total de 71 positivos en el módulo 11 de la cárcel, donde están ingresados los presos especialmente conflictivos, mientras que en el módulo 12 había otras cinco personas infectadas.*
En
todas las informaciones que se nos dan se dice que el brote comenzó entre
presos sin vacuna, pero no se explica después el porcentaje de estos en el
total, lo que es sustraer al caso la cuestión relevante.
Por
ejemplo, si todos los presos si vacunar estuvieran juntos en el módulo 11, la
cuestión sería interesante, pero puede que creara un cierto conflicto. Se nos
dice que el módulo 11 es el de los presos de "especial conflictividad".
Eso es interesante, desde luego, pero en el momento en el que vivimos lo de
mayor interés es saber si para el aislamiento se ha tenido en cuenta no solo su
conflictividad, sino también "su conflictividad vacunal", por
llamarla así.
Me
imagino que para no vacunarse, los presos esgrimieron sus derechos individuales
a no hacerlo. Esto es lo que se hace en la calle, pero en la prisión ¿ocurre lo
mismo? Si estamos separando (y vamos a tener que hacer lo más) entre personas
vacunadas y sin vacunar porque las primeras representan un peligro obvio para
el resto de la comunidad, ¿no sería sensato hacer lo mismo en la cárcel? Si no
te quieres vacuna, de acuerdo, estás en tu derecho, pero entonces vivirás junto
a otros que han reivindicado el mismo "derecho" que tú. ¿No es lógico
y justo?
Lo que
sí me parece especialmente injusto es
que si una persona está vacunada se la obligue a convivir en proximidad con
personas que son antivacunas y probablemente rechacen las demás medidas de
prevención. Es como una forma de "condena" a los que sí se han
vacunado.
Sorprendentemente,
ninguna de las informaciones vistas van más allá de la cuestión crucial, ¿cuántos
de esos 76 positivos en el brote estaban sin vacunar y si estaban entremezclados
en los módulos vacunados y antivacunas?
¿Estaban
juntos todos los presos sin vacunar? ¿Estaban entremezclados? La cuestión es
importante desde varios puntos de vista, aunque un tanto incómoda para las
autoridades en cualquiera de sus respuestas. ¿Pueden agrupar a los antivacunas?
Me imagino que sí, pero, ¿cuánto iban a tardar en salir "voces"
señalando que se les expone a un elevado riesgo de contagio? Pero es lo que
ellos precisamente "niegan" como antivacunas que son. Por ello,
deberían —siendo consecuentes— ser ellos mismos los que solicitaran estar
alejados de los "infectados" por la vacuna, las víctimas de
experimentos científicos, etc. etc. Sin embargo, no lo han hecho que sepamos.
Por
otro lado, los presos vacunados tendrían derecho a mantener lejos a los no
vacunados, a la vista de los nuevos contagios. También habría voces, de los
familiares a distintas agrupaciones, que exigieran que se creara un módulo
separado para los que no quisieran vacunarse. Sin embargo, esto —que yo vea— no
se menciona en ninguno de los artículos publicados.
En ConSalud.com, una página dedicada a la información sanitaria se nos dice en el artículo publicado el 9 de abril de este año, y titulado:
La última actualización de la Estrategia de
vacunación, con fecha del 30 de marzo de 2021, se concreta más sobre cómo debe
implementarse el plan de vacunación en las cárceles españolas.
Por un lado, los trabajadores de
Instituciones Penitenciarias se ubican dentro del Grupo 3, concretamente en el
Grupo 3B, por esta misma razón en la actualidad están siendo llamados por los
servicios de salud de las CC.AA para vacunarse.
Por otro lado, y sin concretar todavía una
fecha ni más detalles, se indica lo siguiente: "La población penitenciaria
agrupa a personas de todas las edades y con condiciones de riesgo. Por razones
de factibilidad y de acceso a los centros en los que se encuentran y,
atendiendo al mayor riesgo de exposición y al principio de necesidad y de
protección frente a la vulnerabilidad, se recomienda agrupar y simplificar las
actividades de vacunación en esta población, atendiendo a las circunstancias de
cada centro".
En este sentido, el documento consensuado por el Ministerio de Sanidad con las CC.AA y aprobado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud indica que se iniciará la vacunación de este colectivo "en el momento que se considere más adecuado", pero coincidiendo, al menos, con el grupo 8 y "atendiendo a las características de la población de cada centro penitenciario, se utilizará la vacuna más conveniente".**
Como se
aprecia, siempre se dice cuándo te toca vacunarte, pero no qué ocurre si no te quieres vacunar, seas funcionario o preso. En
España y en algún país más —como
Francia, del que sí tenemos noticias— sabemos que existen núcleos de personas
resistentes a la vacunación, incluso en las residencias de mayores, un espacio
muy sensible y en el que no vacunarse implica una grave irresponsabilidad. En
uno de los brotes que se notificaban ayer mismo, se señalaba que el contagio se
había producido por una persona que "entra y sale", lo que
evidentemente no apunta ni a un residente ni probablemente a un familiar, sino
a algún "resistente" a la vacunación.
La
"resistencia" a la vacunas plantea serios problemas en muchos
sectores en los que el tipo de trabajo crea situaciones de peligro por sí
mismo, como ocurre en residencias, prisiones o cualquier otro lugar en el que
se produzcan interacciones próximas sin demasiadas posibilidades de eludirlas,
así como poblaciones de riesgo (ancianos en un residencia, jóvenes en un aula,
en un campamento, etc.)
El 15 de junio, El Independiente titulaba "Las cárceles logran la inmunidad de grupo: más del 80% de los presos está vacunado", con información firmada por Antonio Salvador. De nuevo aparecen los conceptos que, como "inmunidad de grupo" estamos comprobando que no funcionan conforme pasa el tiempo. En el artículo se señala en su inicio:
El objetivo de alcanzar la inmunidad de grupo
frente a la covid-19 que se ha marcado el Gobierno para mediados de agosto se
ha alcanzado más de dos meses antes en las prisiones. Más del 80 % de los
reclusos que se encuentran actualmente en régimen cerrado han recibido ya la pauta
completa y a casi el 90 % de los funcionarios se les ha administrado al menos
la primera dosis del suero, lo que permite afrontar la pandemia con menores
niveles de incidencia.
De acuerdo con los datos provisionales
facilitados a este diario por la Secretaría General de Instituciones
Penitenciarias, unos 35.000 de los 47.000 reclusos han sido ya vacunados. De
éstos, unos 5.000 se encuentran en semilibertad, por lo que se inmunizan en los
puntos habilitados por los servicios sanitarios de la comunidad autónoma en la
que residen como cualquier otro ciudadano y quedan fuera del ‘control’ del
Ministerio del Interior. Excluido ese volumen, el porcentaje supera el 83 %.
Las fuentes precisaron que, por razones de
operatividad, unos 31.000 han recibido el fármaco monodosis de Janssen para
evitar el doble desplazamiento del personal sanitario a los centros
penitenciarios. Ello ha propiciado que el proceso haya sido más rápido en las
cárceles -entre un 5 y un 10 % se habría negado a protegerse frente al coronavirus-
y que la inmunidad de rebaño se haya logrado mucho antes de lo que Pedro
Sánchez se ha marcado para el conjunto de la ciudadanía: el 70 % de la
población con doble pauta el 18 de agosto.***
Pese a
todo ello, como vemos, los contagios se siguen produciendo en las prisiones sin
que se nos dé mayor explicación más allá de la consabida de "no hay vacuna
eficaz al 100%", una respuesta absurda que elude que la vacunación es solo
una parte del proceso, en el que hay que establecer otros tipo de protocolos
básicos que eviten que esto se siga produciendo, con aumento de las
reinfecciones, con una o dos pautas.
Tener
un núcleo "duro" en las prisiones que se resista a ser vacunado es un
problema muy diferente al de los "antivacunas por libre". Lo que
queda muy claro es que si, por los motivos que los científicos puedan
explicarnos, se siguen produciendo contagios, pese a alcanzar las cifras según
las cuales debería reducirse, las estrategias frente a los antivacunas van a ser
cada vez más complicadas. En la prisión canaria ha sido suficiente un 10%, nos
dicen, para que se produzca un brote de 76 personas por ahora.
En
RTVE.es leemos la siguiente información "Italia exigirá el certificado
sanitario a los profesores y universitarios a partir de septiembre"****.
¿Podemos permitirnos "antivacunas" entre el personal docente y de servicios
y el alumnado en España? Va a ser una cuestión candente en cuanto que a las aulas de las
Universidades españolas vayan grupos de jóvenes, incluidos en el de mayor
incidencia —de 20 a 29 años— de los contagios actualmente.
Es una
novedad respecto al curso pasado, en el que no había vacunas apenas. Pero en
este tiempo, la cuestión ha variado sensiblemente. Las universidades no quieren
ni en pintura oír hablar de educación online por temor a que caigan en picado
sus matriculaciones, pero afrontamos un nuevo curso donde las vacunas tienen
una eficacia relativa (atenúan los síntomas, pero no impiden el contagio) y
donde se concentran los grupos más "complejos" (por no decir otra
cosa). ¿Estará para septiembre, cuando comienza el curso, todo el mundo
vacunado? Está claro que Italia no tiene complejos a la hora de cerrar. Nosotros
preferimos vivir fantasías para salvar temporadas, cursos o cualquier otro tipo
de acontecimiento.
Lo poco estructurado de los protocolos aplicados a las cárceles, donde solo se estipula cuándo le toca a cada uno, no vaya a protestar alguien diciendo que los presos tienen "privilegios" de vacunación frente a los que están fuera, nos lo muestra.
Seguimos
con estrategias muy "blandas" y poco resolutivas. Por
"blandas" me refiero a muy genéricas, que evitan entrar en los casos
reales que, dentro de una prisión, son bastante obvios: cómo organizar la vida
dentro de la prisión ante la amenaza del COVID-19 teniendo en cuenta los tipos
de situaciones que se pueden encontrar, los espacios usados, etc.
Creo
que nos hemos contagiado de unos lenguajes en los que procura comprometerse lo
menos posible quien los utiliza y que, sin embargo, le toca al de abajo
(comunidad autónoma, prisión, universidad...) decidir cómo va a tener que
aplicarlo.
La
cuestión de la prisión canaria es indicativa de los problemas que se nos
presentan y se nos pueden presentar en el futuro, cuando los vacunados y no
vacunados lleguen al extremo y haya que tomar decisiones sobre relaciones,
comportamiento y medidas de seguridad, aspectos todos ellos concurrentes en
esta pandemia. La prisión canaria ha sido un pequeño microcosmos.
Las informaciones anteriores sobre la prisión son bastante complicadas y "conflictivas" parece que se queda algo corto para describirlo. Ahora el brote acaba de complicar las cosas.
* "Un brote con 76 positivos obliga a poner la prisión Las Palmas II en cuarentena" Canarias7 4/08/2021 https://www.canarias7.es/sociedad/brote-positivos-obliga-20210804205256-nt.html
** Nacho Cortés "Estrategia de vacunación Covid-19 en Prisiones: La inmunización de presos se iniciará con el Grupo 8" ConSalud.com 9/04/2021 https://www.consalud.es/pacientes/especial-coronavirus/estrategia-vacunacion-covid-19-prisiones-inmunizacion-presos-iniciara-grupo-8_94966_102.html
***
Antonio Salvador "Las cárceles logran la inmunidad de grupo: más del 80%
de los presos está vacunado" El Independiente 15/06/2021
https://www.elindependiente.com/espana/2021/06/14/las-carceles-logran-la-inmunidad-de-grupo-mas-del-80-de-los-presos-esta-vacunado/
****
"Italia exigirá el certificado sanitario a los profesores y universitarios
a partir de septiembre" RTVE.es 6/07/2021
https://www.rtve.es/noticias/20210805/italia-exigira-certificado-sanitario-profesores-universitarios/2152560.shtml
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