Joaquín Mª Aguirre (UCM)
George
Orwell le puso nombre, "vaporizar" y era parte del trabajo de Winston
Smith, el protagonista de su célebre novela 1984.
En estos tiempos, puede que a alguno le suene a nuevo método para dejar de
fumar, pero no. "Vaporizar" era eliminar de las fotos a aquellos que
habían caído en desgracia, una práctica común durante el estalinismo, que es el
estado político que inspiró a Orwell la obra. Al poder no le gusta recordar a
aquellos no son fieles o le pueden perjudicar. Los hace desaparecer, los
"vaporiza".
El
titular de 20minutos me ha llevado a
pensar en Orwell: "El PSOE 'borra' a Santos Cerdán y Begoña Gómez en el
vídeo de la celebración de Ferraz por los dos años del 23-J". En el
artículo (firmado a lo Fuenteovejuna, sin nombre propio) se señala:
El PSOE ha difundido este miércoles un vídeo para celebrar el segundo aniversario de las elecciones generales del 23 de julio de 2023. El contenido, compartido en la cuenta oficial del partido en redes sociales, ha llamado la atención sin embargo por dos ausencias significativas: la de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la de Santos Cerdán, exsecretario de Organización del PSOE.
Gómez y Cerdán estaban presentes en la noche electoral del 23-J en la sede socialista de la calle Ferraz y ambos aparecían en el vídeo original que inmortalizaba los momentos de euforia tras los resultados. En aquellas imágenes, Cerdán aparecía a la derecha de la vicepresidenta María Jesús Montero, mientras que Gómez se situaba a su celebrando junto a su marido y otros miembros destacados del partido.
Sin embargo, en la versión que el PSOE ha publicado para conmemorar los dos años desde aquellas elecciones, ninguno de los dos figura ya en pantalla. Las imágenes han sido escogidas para mostrar únicamente a Sánchez flanqueado por Montero y por la presidenta del partido, Cristina Narbona.
La desaparición de ambos del vídeo coincide con el delicado momento judicial que atraviesan. Begoña Gómez está formalmente investigada por presuntos delitos de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, intrusismo profesional y apropiación indebida.*
Esta forma de actuar es infantil en un sistema democrático en el que no solo te lo van a recordar, sino que lo van a usar en tu contra. La democracia tiene memoria por más que está se trate de alterar o manipular mediante ejercicios tan tontos como este.
La forma de hacer desaparecer a los "problemáticos" va a pasar a ser un arte, dado el número de antiguos militantes, cargos, etc. que se han vuelto un activo negativo por motivos muy diversos pero todos con el mismo resultado: pasan a ser una carga para el partido, un borrón en el historial, etc.
En un mundo político en el que todo es comunicación, todo se traduce a lo que se puede contar o mostrar, los casos que hay que silenciar tienen el efecto contraproducente, se airean más de lo posible.
Sacar un vídeo de celebración de la victoria electoral en un momento de crisis política y gubernamental, con el presidente debilitado haciendo las Américas para que no le saquen la foto perdiendo la votación de los "anti apagones", donde la cara es el espejo del alma, no parece muy prudente y si te lo pillan rápido, pues peor todavía.
Algunos estarán comentando con cierta ironía si habrá que eliminar (vaporizar) a algunos para el próximo aniversario. Como las cosas sigan así, no sé quién va a quedar en el vídeo.
Por el lado del PP, lo del falseamiento de los títulos universitarios, una epidemia que creíamos que se había acabado. Es tan fácil detectarlo que uno no deja de sorprenderse de que todavía funcione. El PP alaba la honestidad de la mentirosilla, al renunciar a todos sus puestos y cargos.
Dentro del proceso orwelliano señalado anteriormente, esta especie de enaltecimiento de los arrepentidos no deja de ser un mal menor, una gloriosa derrota, un canto a la honestidad tardía con el toque judeocristiano del arrepentimiento para poder pasar al otro mundo, que es donde la enviarán en cuanto deje de ser titular de prensa.
Es raro que no se haya creado todavía la Medalla del Arrepentimiento, que se concedería a aquellos que ven la luz en algún momento de su vida y deciden decir toda la verdad, deshaciéndose de los ropajes falsos con los que se han mostrado previamente. Dicen sus contrarios que tenía tres CV y que ninguno coincidía. ¡Qué se le va hacer! Ahora tendrá tiempo libre para hacer bueno alguno.
No se comprende muy bien esta fiebre curricular entre los políticos por parecer "brillantes", "preparados", "sabios" incluso. Luego algunos desdicen con sus actos el brillante CV.
Es el signo de los tiempos: más que ser, parecer. ¡Tenía razón Baudrillard con aquello del simulacro. La ex universitaria Núñez tendrá tiempo ahora para hacer bueno su CV y hacer que la realidad y la ficción coincidan. Se puede dimitir de todo menos de lo que uno mismo ha dado por bueno. En estos días se habla de que hay muchas universidades; seguro que encuentra plaza y está a tiempo para la preinscripción.
No vamos a decir que esté bien falsificar el CV, pero no es gran cosa en comparación con lo que estamos viendo. A cada uno lo suyo. En esto de las mentiras curriculares, empiezas y ya no puedes parar. Ayer ya comentaban algunos que como se pongan a tirar de la manta curricular va a haber muchas sorpresas. Si otros lo hacen para conseguir trabajos, ¿por qué no hacerlo en el trabajo político?
No me resisto a traer de nuevo a Orwell y ver cómo supo describir un universo de mentiras, la base del control. La idea de vaporizar a los otros es una forma definitiva de falsear la realidad. El poder acaba siendo la fuente de la distorsión y de la nueva verdad:
La expresión «por la nueva y feliz vida» reaparecía varias veces. Éstas eran las palabras favoritas del Ministerio de la Abundancia. Parsons, pendiente todo él de la llamada de la trompeta, escuchaba, muy rígido, con la boca abierta y un aire solemne, una especie de aburrimiento sublimado. No podía seguir las cifras, pero se daba cuenta de que eran un motivo de satisfacción. Fumaba una enorme y mugrienta pipa. Con la ración de tabaco de cien gramos a la semana era raras veces posible llenar una pipa hasta el borde. Winston fumaba un cigarrillo de la Victoria cuidando de mantenerlo horizontal para que no se cayera su escaso tabaco. La nueva ración no la darían hasta mañana y le quedaban sólo cuatro cigarrillos. Había dejado de prestar atención a todos los ruidos excepto a la pesadez numérica de la pantalla. Por lo visto, había habido hasta manifestaciones para agradecerle al Gran Hermano el aumento de la ración de chocolate a veinte gramos cada semana. Ayer mismo, pensó, se había anunciado que la ración se reduciría a veinte gramos semanales. ¿Cómo era posible que pudieran tragarse aquello, si no habían pasado más que veinticuatro horas? Sin embargo, se lo tragaron. Parsons lo digería con toda facilidad, con la estupidez de un animal. El individuo de las gafas con reflejos, en la otra mesa, lo aceptaba fanática y apasionadamente con un furioso deseo de descubrir, denunciar y vaporizar a todo aquel que insinuase que la semana pasada la ración fue de treinta gramos. Syme también se lo había tragado aunque el proceso que seguía para ello era algo más complicado, un proceso de doblepensar. ¿Es que sólo él, Winston, seguía poseyendo memoria?
Estamos acostumbrados a leer 1984 como un alegato contra el estalinismo, es decir, algo del pasado y del totalitarismo de Stalin. ¿Pero y si nos está hablando sobre el "futuro", sobre algo a lo que nos acercamos peligrosamente? Es una virtud de las grandes obras; nunca dejan de enseñarnos algo del presente.
En un mundo donde es posible hacer circular información falsa y silenciar la verdadera, el destino está cada vez más claro. Hoy se nos vende "felicidad" y "éxito" para descubrir después que no hay tales, que son una fantasía que es posible crear y aceptar, como señala Orwell en el párrafo citado. Ese deseo de "vaporizar" a los que dudan del "éxito" proclamado es el resultado de una polarización que busca que aceptemos y rechacemos acríticamente y nos hace manipulables. El "doblepensar" está más arraigado de lo que suponemos y muchos psicólogos lo consideran una característica de las sociedades modernas sometidas a los flujos de información constantes y cambiantes.
Al final, el video manipulado, el expediente manipulado, todo lo que se falsea para ocultar la realidad, parte de ese mundo desmemoriado en el que vivimos. Afortunadamente todavía tenemos memoria de muchas cosas, mal que les pese a algunos.
Si no ha leído 1984, este verano es un buen momento. No se arrepentirá.
* "El PSOE 'borra' a Santos Cerdán y Begoña Gómez en el vídeo de la celebración de Ferraz por los dos años del 23-J" 20minutos 23/07/2025 https://www.20minutos.es/noticia/5733986/0/psoe-borra-cerdan-begona-gomez-celebracion-ferraz-por-23-j/






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