La casa sin guardar

 Joaquín Mª Aguirre (UCM)

El gobierno improvisa; la oposición obstruye. En esta sencilla frase se basa la política española desde hace años. Da igual quién sea el gobernante; da igual quién sea la oposición. La cuestión es ¿hasta dónde se puede llegar así?

Hoy se reúnen las Comunidades con el gobierno. La comunidades socialistas, lo tienen todo claro; por contra, las que no lo son ya hablan de unilateralismo e improvisación. Eso respecto a la oposición oficial. La oposición de los socios de gobierno espera tranquila a apuntarse lo positivo como una iniciativa propia, mientras que rechaza por medio de sus portavoces todo lo que no le gusta o favorece.

Las declaraciones de la ministra Maroto ante la reunión es que van a "esclarecer" y a advertir que son de cumplimiento obligado, que es un compromiso con Europa ahorra el 7%.

Así nos explican en RTVE.es el sentido de la reunión de hoy:

El Gobierno ha convocado para este lunes la Conferencia Sectorial de Energía para analizar junto a los máximos responsables autonómicos en las áreas de Energía, Industria y Comercio los detalles del real decreto de medidas de ahorro y eficiencia energética y "despejar dudas" sobre su contenido, que será de obligado cumplimiento a partir del miércoles 10 de agosto.

Una cita que se celebrará a partir de las 10:00 horas de forma telemática y que estará presidida por la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, junto con la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen. A la reunión, además de las comunidades autónomas, también está convocada la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).

Según ha señalado en un comunicado el Ministerio de Transición Ecológica, la reunión pretende "alinear las políticas de ahorro y eficiencia energética de todas las administraciones y reafirmar el compromiso de ahorro de un 7% del consumo energético adquirido por España ante la UE para hacer frente a las consecuencias socioeconómicas del conflicto en Ucrania". El encuentro también servirá para resolver dudas sobre el alcance y aplicación de las disposiciones contenidas en el real decreto.*

 

Uno se pregunta si se puede mantener una política de enfrentamiento para todo ante una situación de crisis grave, como la que vivimos. ¿Es tan difícil acordar una serie de aspectos técnicos en los que estar de acuerdo? Avisamos que la rápida respuesta de Díaz Ayuso y Madrid con ella traería consecuencias en el sentido que dejaba ya en situación bélica la discusión de algo que es absolutamente necesario, como es la planificación del ahorro energético. Pero parece que en España no hay otra manera.

Lo que se está perjudicando, además de a todos los españoles, con esta forma conflictiva de hacer política, de preferir enfrentamientos a colaboración, es el modelo autonómico, cada vez más debilitado por la demostración de su inefectividad para los planes globales, los que afectan al país. Cada autonomía es una trinchera en la guerra permanente. Si en otros países, el problema es la "cohabitación", en España además de la cohabitación en el poder (estos socios de gobierno trabajando a dos vertientes), está el coste de los apoyos políticos fuera del gobierno, cuyos objetivos declarados no son el "bienestar español", al que se consideran ajenos, y finalmente la oposición oficial. Con un panorama así, ¿cómo es posible gobernar?

El gobierno tiene además una amenaza, si pacta con la oposición en tema de estado, puede quedarse tirado en la legislatura. En política, los números son los números, pero hay ciertos números que tienen intenciones detrás. Eso lo puede entender cualquiera.

Lo que no es muy comprensible es que la amenaza de romper la baraja sea una constante ante un gobierno que tiene unas responsabilidades por encima de su propia estancia en la legislatura, como ocurre en estos momentos con el cumplimiento europeo, que no es por parte de un gobierno, sino de un país ante la comunidad.

El sentido común habría recomendado, ya que había que hacerlo, evitar el conflicto llamando desde el principio a las comunidades a hacer propuestas sobre ahorro energético. Pero eso era demasiado sencillo. Era mejor poner un plan sobre la mesa contra el que muchos tuvieran algo que decir. Se aplica el principio español de que cuantas más protestas es que el plan es mejor.

La parte socialista del gobierno sigue obsesionada con una oposición que es solo una parte de los problemas que tiene. Parece que tuviera interés especial en la confrontación, sin entenderse muy bien por qué, pues lo único que hace de esta manera es fortalecer a aquellos que mañana le disputarán los votos por formar parte de un mismo espacio político o a los que desean ver debilitado el conjunto del sistema, como ocurre con los socios nacionalistas, que claramente no van a contribuir al bien general, ya que sus votos están donde están.

La política de ahorro energético, algo esencial para España, no ya porque lo diga Europa, sino por sí misma, era una ocasión dorada para mostrar la talla política y su capacidad de compromiso. No sé lo que saldrá de la reunión. Solo sé que se han creado las peores condiciones, por parte de unos y otros, para realizar una operación conjunta lo menos lesiva para todos, algo eficaz, que es lo que la gente reclama.

Si la solución es convertirse todos en Díaz Ayuso, que es la que le saca rentabilidad a la oposición sistemática, el caos está garantizado porque no habrá forma de encontrar niveles superiores de eficiencia política, es decir, de gestión positiva de lo común. 

Hay que cambiar la percepción de lo que significa gobernar y el modo de hacerlo. Pero mucho me temo que el entrenamiento continuado en el enfrentamiento haya distorsionado demasiado el discurso político y, especialmente, haya realizado una selección natural del tipo de político ajustado a este entorno combativo, a esta jungla de la política en la que vivimos.

Espero que se recupere algo de sensatez y que de la reunión de hoy salgan algo más que reproches. Espero que sea algo más que un gobierno diciendo que la oposición no quiere entender y de una oposición diciendo que el gobierno quiere imponer su santa voluntad.

El tema no es baladí y alguien debería darse cuenta de que la frustración que se puede recoger en el próximo curso político puede ser enorme si los problemas crecen (como es previsible) y sin embargo no se atisba signo alguno de arreglos que permitan que esto repercuta sobre todos de la peor manera. Los ciudadanos tenemos por delante un futuro inmediato de sacrificios y limitaciones; creo que merecemos algo más por parte de quienes tienen la responsabilidad del conjunto, tanto para gobernar como para hacer oposición.

Creo que es lo que esperamos y deseamos todos. Las circunstancias lo exigen. 

* "El Gobierno cambia a este lunes la reunión sobre ahorro energético, con la presencia de Ribera y Maroto" RTVE.es 7/08/2022 https://www.rtve.es/noticias/20220807/gobierno-adelanta-este-lunes-reunion-sobre-ahorro-energetico-presencia-ribera-maroto/2394842.shtml