Joaquín Mª Aguirre (UCM)
A
vueltas de nuevo con la Viruela del Mono, de la que seguimos en cabeza mundial,
otro triste récord que apuntarnos. No vamos a insistir demasiado en que en toda
enfermedad de transmisión, lo importante es establecer las prácticas, escenarios,
situaciones, etc. en las que se transmite, es decir, se producen los contagios.
Las
quejas de grupos sociales porque dicen que "se les estigmatiza" son realmente
absurdas si eso es lo que dicen los datos. Con ellos en la mano, que cada uno
asuma los riesgos que quiera porque está informado.
La última identificación de escenario y prácticas había sido en una sauna madrileña, en la que un cartel en la entrada confirmaba la "seguridad" del lugar. Fue cerrada, como no podía ser de otra forma. La última la hemos tenido hace unos días, cuando se han identificado más de diez contagios en un local de tatuajes en Cádiz. El Diario de Cádiz se pregunta en titulares "Viruela del mono en Cádiz: ¿Por qué ha habido un brote en un local de tatuajes de San Fernando?" y nos cuenta:
El brote de viruela del mono en San Fernando con 12
contagios, de momento, ha activado todas las alarmas en este municipio
isleño. El foco de las infecciones está situado en un negocio de tatuajes,
que ya ha sido cerrado por la Consejería de Salud.
De momento, no se han confirmado más contagiados y las
autoridades esperan que no vaya a más. Ahora, se están abriendo investigaciones
para esclarecer la causa de este brote en el local de tatuajes.
A la espera de conocer la explicación oficial de las
instituciones, sí que hay una serie de consejos y recomendaciones por
parte de profesionales sanitarios para evitar contraer esta enfermedad.
¿Cómo se contagia la viruela del
mono?
Esta enfermedad infecciosa que ya suma en España un
total de 3.125 positivos, el país europeo con más, se propaga por el
contacto estrecho. En el caso del local de tatuajes, alguna persona infectada
propagó esta enfermedad y se fue transmitiendo entre clientes.
Una persona con viruela del mono puede infectar
mientras tenga síntomas y entre la semana dos y cuatro, según la OMS. Esta enfermedad
puede contraerse a través del contacto físico, algo casi obligado en un local
de tatuajes, con las erupciones y costras que aparecen en el cuerpo y
con fluidos corporales como pus, sangre o saliva.
Y no solo con el contacto físico, también a través de objetos. La ropa o los utensilios usados por una persona infectada pueden servir para hacer caer a otra. Por lo que en caso de convivir con un positivo, si no es posible abandonar el hogar, es necesario esterilizar todo lo que toque el contagiado.*
Pese a llevar ya unos años sumergidos en una crisis sanitaria, la manera de informar apenas ha cambiado, induciendo a polémicas inútiles y absurdas como forma de atracción del público. Se confunden en la mayoría de los casos los efectos con las causas, creando falsas seguridades sobre los cambios de escenarios. Se supone que si uno hace lo mismo en otro sitio, no pasará nada, lo que no es cierto.
Cada día descubrimos un lugar o actividad nueva en la que se producen los contagios. En este caso ha sido un local de tatuajes, ya que es una práctica de contacto de elevado riesgo ya que implica la manipulación de la piel con una serie de instrumentos que pueden no estar correctamente desinfectados. Pero podría ser perfectamente en muchos otros espacios y actividades diferentes.
En toda enfermedad que tiene incidencia por la transmisión social, la prevención a través del sentido común es esencial. Si creo que solo en saunas y locales de tatuaje me contagio, estoy preparando el terreno para contagiarme en el nuevo espacio que descubriremos mañana. Es cuestión de tiempo.
Es necesario separar lo circunstancial de lo esencial para percibir dónde está el foco real del contagio y extrapolarlo a las actividades que podamos realizar. Sin embargo, pese a todo, los medios se dedican a fijarse en lo circunstancial antes que en lo esencial.
La explicación es clara: lo circunstancia es lo que se percibe y lo que se puede recoger y transmitir. Los medios tienden a favorecer lo excepcional frente a lo normal; es parte de su naturaleza. Di la misma forma, la noticia está en el salto de la sauna al tatuaje, aunque los contagios respondan a la misma lógica.
En el COVID da igual que el que se contagie sea Boris Johnson que Donald Trump o que un ciudadano común que viaja en el metro. Nos puede afectar en lo social, impactarnos más o menos por el revuelo mediático, pero lo cierto es que el mecanismo biológico es absolutamente el mismo. Uno se contagiará en el transporte público por no mantener las distancias, el otro por dar la mano a un jefe de estado; al coronavirus le da exactamente igual. La larga mesa de Vladimir Putin no es la de Charles Foster Kane en Xanadú. Es poder, sí, pero sobre todo distancia por seguridad.
Si usted piensa que como no frecuenta saunas o no se hace tatuajes está libre de peligros, se equivoca. Lo importante no es eso, sino el contacto, que puede ser de muchos tipos evidentemente. Higiene y distancia, vigilancia de lo que hace; controle los tiempos y contactos más allá de cualquier otra circunstancia.
No empeñamos en que nos pongan una etiqueta en la entrada de cualquier sitio que diga "es seguro", pero poner el cartel, como ocurrió con la sauna madrileña (con un "Madrid es seguro"), no sirvió de mucho. Más bien al contrario. Nos gusta más confiar en los demás que vigilar nosotros mismos. Así nos va. Ayer se notificó la primer víctima mortal en España y, como señalamos, vamos a la cabeza de contagios.
* "Viruela del mono en Cádiz: ¿Por qué ha habido un brote en un local de tatuajes de San Fernando?" Diario de Cádiz 26/07/2022 https://www.diariodecadiz.es/vivir_en_cadiz/Viruela-mono-cadiz-San-Fernando-brote-local-tatuajes_0_1705330153.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.