sábado, 16 de abril de 2022

Más amenazas rusas

 Joaquín Mª Aguirre (UCM)

Desde que comenzó la invasión de Ucrania, Rusia se ha dedicado a lanzar amenazas a todos, en una agresividad sin precedentes. En estos momentos, un titular de RTVE.es señala "Rusia advierte a EE.UU. de que si no deja de proveer armamento a Ucrania habrá "consecuencias imprevisibles". En el diario El Mundo, el titular es en el mismo sentido "Moscú exige a EEUU que deje de asistir a Kiev, so pena de enfrenarse a "consecuencias impredecibles"". Los diarios recogen estas y otras amenazas con las que trata de frenar la solidaridad y ayuda a Ucrania, que se le resiste. Esto ha hecho dispararse el número y objeto de las amenazas rusas.

En Antena 3 se recogía ayer la respuesta polaca a más amenazas de Putin:

A finales de marzo, el Kremlin hizo una advertencia a Polonia tras la expulsión de 45 diplomáticos rusos: "Varsovia se ha embarcado en una peligrosa escalada en la región, que no procede de intereses nacionales, sino que es en el marco de la directrices de la OTAN".

Al respecto, las autoridades rusas también aseguraron que "toda la responsabilidad de las posibles consecuencias" recaía por completo en Varsovia". "Rusia no dejará este ataque hostil sin una respuesta que haga pensar a los provocadores polacos", indicaron entonces.

Sin embargo, el país polaco ha avisado que no se quedará quieto si Moscú decide cruzar ciertas líneas rojas como ataques dentro de su territorito o en el de cualquier miembro de la OTAN. En este sentido, los polacos han tachado de provocaciones los bombardeos de Rusia a pocos kilómetros de su frontera como en la base aérea de Yavoriv o en Leópolis.

Por esta razón está reforzando hasta los 300.000 efectivos y modernizando su armamento con la reciente adquisición de tanques Abrams y sistemas británicos antiaéreos. *



Que Rusia considere "provocadores" a todos aquellos que no se pliegan a sus deseos, a aquellos que se resisten, no deja de ser una ironía que nos muestra que estamos ante una patología peligrosa.

La mayor parte de los analistas coinciden en que es el fracaso ruso en sus objetivos y la inesperada duración de la guerra lo que está aumentando la agresividad rusa y el nivel de sus amenazas, además evidentemente de los efectos de las sanciones internacionales, que le complican la vida en el interior. Un pueblo no se alimenta solo de propaganda, al menos no durante mucho tiempo y Rusia se revuelve contra todos aquellos que están contribuyendo a que su presa se resista más de la cuenta, ya sea con ayudas humanitarias o militares. Cada aprobación de envío de armas es un aumento de la capacidad de resistencia ucraniana y un dolor de cabeza para Putin que lo ve traducido en pérdidas propias, tanto de fuerzas como de prestigio. La larga duración de la guerra —hoy algunos auguran que podría durar hasta finales de año— se vuelve contra Putin y le complica la vida con sus socios más forzados, que pueden no estar tan gustosos de asumir sanciones en un tiempo más largo del pensado.

La respuesta polaca no es la única y son varios países, como sucede con Suecia, que han manifestado sin tapujos que solicitarán en el momento adecuado la entrada en la OTAN. Esta es una cuestión que afecta al conjunto de Europa, que sigue sin tener un ejército propio. Al no tenerlo, los países europeos tienen que establecer una alianza con la OTAN, lo que le sirve de excusa a Putin para sus invasiones y amenazas. Si la entrada en la Unión Europea supusiera también la pertenencia a un sistema de defensa europeo Putin lo tendría probablemente más complicado.

Pero cualquier tipo de especulación sobre el futuro tiene que partir de la realidad del presente y esta es solo una: Rusia se ha mostrado como un país agresor y amenazante, como una potencia que cree tener el derecho de controlar la vida y decisiones  de un continente, Europa. El porqué Rusia cree que tiene ese derecho no tiene más realidad que la fuerza ni más idea que "su seguridad", algo que en ningún momento se ha visto en riesgo por parte de país europeo alguno. Es más, Europa está padeciendo ahora el establecimiento de lazos comerciales con Rusia, ya que esta los utiliza como otro elemento de fuerza, de chantaje y amenaza. Parece claro que Rusia ha elegido ser un modelo preciso de potencia agresiva y mala vecina para con aquellos que se desvían se su visión de cómo se debe mover el mundo. Si pretende un mundo poblado de lukashenkos, de dictadores bajo sus alas protectoras, se está equivocando totalmente.



Lo que ha conseguido Rusia es lo contrario de lo que quería o pensaba poder conseguir. Toda Europa está aumentando sus presupuestos de defensa "gracias" al efecto ruso y a sus amenazas constantes. Lo que Rusia le está haciendo a Ucrania, destruyéndola, literalmente, es lo que todos los países europeos tratarán de evitar y la única forma es aumentar su armamento y reforzar sus alianzas. No hay otra.

La esperanza de que la guerra fuera corta ha estado en el pensamiento de muchos, pero pasado ese ecuador mental y bélico, la resistencia de Ucrania es la resistencia de todos. La actitud rusa lo que cambiado todo. No solo es haber llevado la guerra al centro de Europa, junto con la amenaza constante a todos haciendo ver que Ucrania es "su presa", esgrimiendo un pseudo derecho a desgarrarla y destruirla.

El tipo de respuesta dado por Occidente es eficaz, pero se responde con nuevas amenazas bélicas traducidas en ambiguas expresiones como "consecuencias imprevisibles", apelaciones a la guerra nuclear y demás amenazas que cada día vierte.

Desde el punto de vista de los objetivos previstos por Putin, la guerra está siendo un fracaso, algo que se agrava cada día por los reveses diversos, como el hundimiento del Moksva que era titular ayer en los medios de todo el mundo. Si lo que pretendía era mostrar al mundo su fuerza y que este temblara, no lo está consiguiendo por su propia ineptitud. La capacidad de resistencia de los ucranianos ha hecho mella en los rusos, que van cayendo. Los ucranianos sacan la motivación de su sentido patrio, de estar defendido vida y tierra. Los rusos, en cambio, han sido mandados a otro país, algo que ni les va ni les viene. Las noches se hacen muy largas en las guerras y le da a uno por pensar. Y se ponen a pensar las familias en la retaguardia, que sufren por si sus hijos regresarán o vendrán en un féretro. Cada día que pasa esto se intensifica.



Las advertencias sobre lo que pueda hacer Rusia no se deben subestimar, pero tampoco aceptar, en cuyo caso le estaríamos poniendo en bandeja una estrategia para ahora, pero también para el futuro. No le están saliendo las cosas y necesita algo para poner sobre la mesa y negociar su "victoria"; el problema es que ese momento puede ya haber pasado y que salga con las manos vacías o quedándose con más tierra, algo que no le soluciona ningún problema de seguridad y, por el contrario, pone a todos a la defensiva y a pensar en la disuasión.

Sigue siendo un misterio el porqué Putin se ha lanzado a esta aventura. En otras potencias, en distintos momento de la historia, se han encontrado explicaciones a la creación de conflictos bélicos, pero esto no tiene explicación clara, aunque sí avisos. Putin ha roto un orden europeo basado en la confianza y el comercio sustituyéndolo por otro basado en la fuerza bruta. ¿El siguiente paso es obligar a Europa a comprarle el gas? ¿Lo hará bajo amenaza nuclear?

Las amenazas rusas son una forma de complicarse su propia existencia, algo que existirá más allá del fin de la guerra. ¿Pretende dividir el mundo en prorrusos y antirrusos? La batalla europea la tiene perdida por lo antes señalado: ha conseguido que todos se armen. ¿Responderá —como ya lo hace— con más agitación y división, financiando desinformación y partidos amigos?

En la medida en que le está complicando la vida a los que antes la tenían sencilla, Putin se estará creando enemigos silenciosos, pero enemigos, en el interior; son todos esos oligarcas beneficiados por su régimen y que ven cómo se les cierran las puertas del disfrute exterior, de los negocios, cómo se congelan sus cuentas o se embargan su mansiones al sol mediterráneo.  Con ellos no funciona la propaganda; las cuentas corrientes les dicen otra cosa.

Polonia, Suecia, Lituania, Estados Unidos... Son ya muchos los amenazados por Rusia con diversos tipos de apocalipsis. Cuantas más amenazas, se le complica la vida al propio Putin. Debería saber que un paso más hacia la acción produciría una respuesta más contundente y no sé si estará en condiciones de afrontar las consecuencias reales de todo tipo.



* "Polonia eleva el tono y advierte que responderá si Rusia cruza ciertas líneas rojas" Antena 3 Noticias https://www.antena3.com/noticias/mundo/polonia-advierte-que-respondera-cualquier-ataque-rusia_202204156259915fd593ed00019f874c.html


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.