miércoles, 26 de agosto de 2020

Trump y la oscura letra pequeña

Joaquín Mª Aguirre (UCM)
La política constante de engaños y mentiras tiene el peligro de que cuando salen a la luz sea el momento más inesperado. Las prisas de Trump por poner éxitos encima de la mesa en vez de los vergonzosos fracasos que le arrastran y le tienen con un pie fuera de la Casa Blanca no son tampoco buenos consejeros. Con parte de la administración republicana abandonando la nave y otros dentro deseosos de salvarse del hundimiento que suponen las críticas nacionales y mundiales a sus palabras y decisiones, cada vez más ofensivas unas y arriesgadas las otras, Trump está entrando en un proceso complicado y, muchas veces, sorprendentes en el detalle, ya que en el fondo nadie duda de su osadía y falta de escrúpulos para mantenerse en el poder.
Leemos en la CNN un nuevo problema que le salta desde el tan cacareado acuerdo entre Emiratos Árabes Unidos e Israel, que aquí calificamos como "electoralista", un intento de echarle una mano en las próximas elecciones. Trump lo ha vendido como un "gran acuerdo", logrado por el siniestro yerno convertido, tras la lectura de unos libros, en asesor sénior presidencial y en negociador para Oriente Medio. El hecho de que Trump encargue a Jared Kushner un contacto y negociación de este orden intranquiliza por varios motivos, siendo el principal la oscuridad que pueda rodearlo, con el añadido de que los objetivos del presidente estarán por encima de los Estados Unidos.


Trump ha despachado a los funcionarios de los departamentos y ha mandado sus propios negociadores creando la obscuridad mencionada. Recordemos lo ocurrido con las intervenciones de su abogado personal, Rudy Giuliani, y los negocios ucranianos o los contactos con los rusos.
La distorsionada y personalista visión trumpiana de la política solo tiene a él como centro, por lo que hay que presumir que las personas que elige para estos menesteres tienen por objetivo fortalecer al presidente por encima de los intereses nacionales, que pueden coincidir... o no.
La CNN, con el titular "Kushner's secret push to sell F-35 jets to UAE causes frustration among US agencies and lawmakers", publicado el día 20, da cuenta de esa forma paralela, puenteando a los funcionarios del estado, a los profesionales y a las instituciones que tienen tomar decisiones. Pero la visión absolutista del poder trumpiana es implacable y trata de rentabilizar en muchos niveles cualquier acto que pueda ser utilizado.

A secret push by President Donald Trump's senior adviser Jared Kushner to sell advanced arms -- including F-35 stealth fighter jets -- to the United Arab Emirates has caused confusion and frustration among agencies and congressional committees that would normally be involved in such a sale but have been left in the dark.
Kushner is supporting the administration's discussions with the UAE about the potential advanced arms sale, which have been led by the NSC Senior Director for the Middle East, Miguel Correa, a senior administration official said.
The tight hold on details about these discussions has created confusion across the US government, two State Department officials and multiple congressional aides tell CNN.
Trump said the potential sale was "under review" during a press conference on Wednesday. He also said the Emirates have the funds to pay for the military hardware.

Expecting closer cooperation
On Thursday, Anwar Gargash, the UAE minister of state for foreign affairs, said at an Atlantic Council event that "the UAE has indicated that it wants F-35s. The first time we made this request was 6 years ago. We ought to get them. It should be easier to get them." Gargash added that discussions about the F-35 are not connected to the deal with Israel.*


Recordemos que el anuncio del acuerdo hizo saltar los recelos sobre el freno a la expansión de las colonias israelíes. Mientras que Trump vendía que era el acuerdo del siglo por el reconocimiento de Israel tras Egipto, el primero, y Jordania el segundo, de los que habían pasado décadas, llegaba ahora Emiratos. Los comunicados israelíes hacían ver que la detención de los asentamientos era una parada circunstancial, que en cualquier momento podrían reanudarse.
De la firma del acuerdo, solo Donald Trump sacaba rendimiento propagandístico ya que los colonos se indignaron contra Benjamín Netanyahu, considerando que les había traicionado al pactar el parón de la expansión. Por otro lado, los palestinos rechazaban el acuerdo pues no suponía nada nuevo para ellos y sí mucho en contra al debilitar el frente árabe con el reconocimiento de Israel por parte de Emiratos. Solo Egipto (segundo mayor perceptor de ayudas militares tras Israel) se congratuló por el acuerdo por dos motivos obvios, no querían seguir siendo los únicos que firmaron los acuerdos de Camp David y la ONU, que veía que cualquier gesto de reconocimiento de Israel era un paso en el camino hacia la paz. Pero ¿es posible la paz con Trump? Una vez más se ha mostrado como marrullero y divisor. Las noticias denunciadas, como señala la CNN, por medios israelíes dejan en evidencia a Trump y muestra que es capaz de cualquier cosa.


La venta de tecnología puntera, reservada hasta el momento, como es la que revela el acuerdo secreto ha creado malestar dentro y fuera. Los israelíes se dan cuenta que sus nuevos aliados (las alianzas duran por allí y más entre enemigos recientes) tienen acceso a una tecnología militar que les debilita en la zona, aunque exista en el plano teórico y con un recién estrenado aliado. A eso se suma el enfado por haberse ignorado los mecanismos de revisión propios de las cámaras norteamericanas que Trump, una vez más se ha saltado. 
Ya ha habido en días anteriores un revisión con quejas de las ventas de armamento a Arabia Saudí, ignoradas en su momento las consecuencias que puede tener en el polvorín árabe.
Su razonamiento ahora, con Emiratos, puede ser bastante aproximado al siguiente: si los demócratas intentaran frenar esta venta, se les culpará de ser antiamericanos, de no querer la paz en Oriente Medio y, por ello anti israelíes. Evidentemente, con el tiempo que queda no hay mucho margen de maniobra tal como está los demócratas liados en plena campaña para ganar las elecciones.
Lo interesante es, como señalamos, la actitud israelí, que creían estar beneficiándose de un acuerdo en donde las trampas las ponían ellos, para descubrir después que los engañados han sido ellos. ¡Todo muy Trump! Te hacen firmar la paz  y luego le venden mejores armas a tu antiguo enemigo, pensará en Israel Netanyahu.

Fuente: web de la Casa Blanca

Trump consigue así, una vez más el apoyo del mundo de las ventas de armamento, cada vez más poderoso, y realiza la asombrosa contribución pacifista de seguir armando el espacio más armado y conflictivo del mundo, Oriente Medio. La zona es el principal consumidor de armas de todos los países, riqueza que no va a sus pueblos, en los que se trata de mantener ignorancia y disciplina. Lo ocurrido con el asesinato de Jamal Khashoggi, crimen de estado, ordenado por el príncipe heredero es solo una pequeña muestra de la forma de actuar de los aliados de los Estados Unidos, líder del mundo libre.
Lo que tendrá consecuencias al salir esto a la luz es el nuevo desprecio hacia los mecanismos tradicionales de la política norteamericana que, pese a sus alternancias de poder, mantiene respetuosamente la figura de la administración. Pero es precisamente a esa administración a la que Trump está poniendo a prueba constantemente con sus puntos oscuros tanto en negociadores como en las negociaciones. Hemos mencionado el caso de Giuliani, pero podría citarse el del ex embajador norteamericano ante la Unión Europea, un empresario donante del partido republicano, al que le hacía ilusión el puesto pero que no pudo soportar (ni él ni su familia) la infamia que se le pedía, anteponiendo su honor y patriotismo a los intereses de Donald Trump. Lo mismo ha ocurrido con muchos miembros de la administración, civiles y militares, que no han sido capaces de asumir la manipulación que se les pedía. Esto ha hecho, además, que el número de personas disponibles se reduzca, lo que explica el uso de Giuliani y Kushner.


Las peticiones de Trump son cada vez más arriesgadas porque se encuentra cada día más lejos de sus objetivos ganadores. Pero el nivel de riesgo asumido por Trump es una amenaza a la paz, a la vez que involucra más los intereses económicos con la política internacional, como es el caso de lo que está ocurriendo con China, donde ya no se sabe qué es la política y que el imperialismo económico buscando deshacerse de sus competidores invocando, sin prueba alguna, todo tipo de excusas. Los casos de Huawei primero y de TikTok han dejado en evidencia que Trump quiere que el mundo solo compre y dependa, en cualquier plano, de los Estados Unidos.
De nuevo, el sentido de lo que deba y pueda ser la política internacional (igualmente la nacional) choca con la visión de Trump y de los halcones que le rodean, atraídos por los negocios de las armas, la tecnología o cualquier otro negocio en el que se pueda invocar la fuerza como razón de peso. Estados Unidos, con Donald Trump al frente, ha renunciado a la política como negociación y a la paz como objetivo, para entenderla como imposición y riesgo explosivo de los conflictos.



El artículo de Kylie Atwood y Zachary Cohen incide en el "malestar" de las maniobras al margen de las instituciones, pero para Trump no hay institución que la del presidente —"el pueblo, Dios y yo" expresó— y todos los demás son obstáculos y molestias, incluyendo la prensa o los tribunales o ahora el Servicio Postal Nacional, empeñado como está en hacer ver que le van a "robar" las elecciones.
No hay un solo campo que haya quedado en pie tras el paso de Trump. Parecía casi imposible liar más la situación de Oriente Medio, pero lo ha logrado finalmente. Lo sorprendente, una vez más, es el poder de la seducción de un personaje de este calibre: un putero adorado por las familias tradiciones, un amoral apoyado por los integristas religiosos con solo fotografiarse con una biblia en la mano; un enorme ignorante capaz de vender lejía como remedio al coronavirus. Seguirá siendo un misterio. No cómo es, que es meridianamente claro, sino cómo es percibido por aquellos que le han convertido en un mesías, que le han creído hasta el absurdo, y que son capaces de perder la vida por ir, como él, sin mascarilla.


*  Kylie Atwood & Zachary Cohen "Kushner's secret push to sell F-35 jets to UAE causes frustration among US agencies and lawmakers" CNN 20/08/2020 https://edition.cnn.com/2020/08/20/politics/kushner-uae-israel-f-35-fighter-jet/index.html


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