La
polémica producida en Madrid durante el "minuto de silencio" ante el
Ayuntamiento da cuenta de uno de los buques insignia ideológicos de Vox, "la
violencia no tiene género", tal como rezaba la pancarta que lucieron por
separado en un acto que habitualmente es el único que reúne a todos.
Evidentemente
la afirmación de Vox es política; forma parte de su visión del mundo.
Para Vox la "violencia de género" es un invento izquierdista que
subvierte el escenario idílico de las familias que forma parte de su propia
ideología. Ellos también se manifiestan, sí, pero desde un marco diferente,
como una condena de la violencia, sin más. La cuestión puede parecer bizantina,
pero creo que no lo es.
Es indudable
que existe un tipo de violencia ejercida contra las mujeres dentro de las
relaciones familiares (parejas, familias, etc.) que se corresponden con ciertos
patrones de comportamiento que podemos denominar "machistas". El
machismo existe como una forma específica de comportamiento masculino respecto
a las mujeres, una visión de sí mismo y de la "masculinidad" que va
en contra de la propia evolución social en lo que a las relaciones de género se
considera aceptable. Por eso lo que ha hecho Vox es anacrónico, por no decir
reaccionario, al negar lo evidente.
Empeñado
en que la idea de la "violencia de género" es un "invento de la izquierda",
Vox está dispuesto a quedarse solo, lo que para ellos no es condena, sino "virtud".
Nos dicen en El País:
Al ver la protesta de Vox, Almeida se acercó
al grupo de concejales. Ortega Smith, secretario general del partido y diputado
en el Congreso, le recordó que su partido está “en contra de toda la violencia”
y del “discurso de la ideología de género, que es el que marca la izquierda”.
El alcalde coincidió en que él también está “en contra de la ideología de
género y el feminismo del 8-M” y que comparte la necesidad de luchar contra la
violencia intrafamiliar. Pero Almeida añadió que “es una realidad
incontestable” que el 20% de muertes violentas en Madrid “responde al asesinato
de mujeres”. “No me va a decir el alcalde que solo hay que proteger a quien en
las estadísticas sea mayoritario”, respondió Ortega Smith.
“Sabes perfectamente que no te estoy diciendo
esto”, siguió Almeida. “Esta es una realidad dramática, la primera causa de
muerte violenta en la ciudad y la Comunidad de Madrid, y exige un acuerdo y un
consenso; y a mí me habría gustado que me hubieras comunicado al menos que
veníais con otra pancarta”.
Ortega Smith, en una conversación cada vez
más subida de tono, criticó la pancarta que sostenía el resto de grupos políticos,
en la que se leía “¡Basta ya! No a la violencia de género”. Para el partido de
extrema derecha, es “la que pone la izquierda”. “La que pone el Ayuntamiento de
Madrid”, zanjó el alcalde.*
Evidentemente,
todos debemos estar contra toda la violencia. Pero una cosa es eso y otra negar
las características específicas de este tipo de violencia machista cuya
necesidad de considerarla específica
es esencial para poner los medios para combatirla, de los mecanismos de protección
de la amenazadas a los educativos para prevenirla. Una cosa es que sea difícil
de impedir y otra que se ignoren las causas. Vox niega la mayor y la incluye en
la bolsa general, en donde se diluyen sus causas específicas.
Una vez
separado lo masculino de lo machista (una deformación perversa y
violenta), no es difícil aceptar que la sociedad necesita una serie de medidas
en formación en el respeto y la eliminación de determinadas formas anacrónicas
de ver el mundo y de resolver los problemas mediante la violencia. Empeñarse en
que la violencia machista es un "invento izquierdista" es ser más
ciego de lo que se puede uno permitir en estos tiempos. Es algo más que política;
es falta de sentido común.
Pero el
problema de Vox no es solo con las relaciones conflictivas de género. Los medios traen hoy
otro caso, el de la reina de las fiestas de un pueblecito de Otura. La noticia
está en diversos medios. El diario El Mundo la cuenta así:
La Fiscalía está recabando información del
comentario que Vox realizó hace unos días a través de las redes sociales sobre
la proclamación de una joven marroquí como reina de las fiestas de Otura
(Granada), en el que llegó a afirmar que "por lo visto no había otra chica
del pueblo, otureña española, y más guapa".
La familia de la joven, de 16 años, considera
que se trata de un comentario "xenófobo" y lo denunció ante la
Guardia Civil. El fiscal delegado en criminalidad informática y delitos de odio
de Granada, Francisco Hernández, ha iniciado una serie de comprobaciones para
valorar el posible alcance penal de esta publicación que Vox Otura realizó en
Facebook, según han informado fuentes del Ministerio Público.
Hasta el momento la Fiscalía no ha abierto
diligencias de investigación penal y se está centrando en recabar de la Guardia
Civil los datos en torno a este asunto para tomar una decisión.
La madre de la adolescente explicó
recientemente a Europa Press que la joven se enteró de los comentarios a través
de sus amigas, que le mandaron la publicación que Vox Otura había realizado en
su cuenta de Facebook y que ya ha sido retirada.
En ella se podía leer: "Reina de las
fiestas de Otura. Chica marroquí, joven, dos años viviendo en Otura.
Ayuntamiento: PSOE Mayoría absoluta. Comentario Particular: Por lo visto en
Otura no había otra chica del pueblo, otureña española, y más guapa...VAYA
TELA".
La madre ha censurado esta clase de mensajes
que "duelen y hace mucho daño" y ha expuesto que su hija tiene
nacionalidad española y que "lleva toda la vida aquí".**
No se
trata ya de las falsedades que contuviera el tuit —como que la chica no es
española y solo lleva dos años—, sino de la actitud mostrada y de las intenciones
de enrarecer la convivencia en un pueblo que precisamente no había tenido problema
alguno en que su reina de las fiestas fuera una española de origen marroquí. La
actitud de Vox —es evidente— es crear problemas donde no los había.
Ya no se
trata, como en el caso madrileño, de la interpretación de los hechos, de una
teoría propia sobre la violencia y de la negación de los demás; se trata ahora de
crear un conflicto xenófobo a partir de un hecho específico que se interpreta
en contra de la mayoría. La zafiedad del mensaje deja en evidencia la pobreza
de ideas y el uso malintencionado al falsear los datos.
Con
este nuevo caso, Vos muestra su concepto de lo que debe ser una comunidad, un
pueblo, excluyente e insultante. Insulta
en primer lugar al propio pueblo. ¡Son del PSOE!, usan como argumento; es
decir, son "traidores a España" eligiendo a "una marroquí",
la izquierda anti nacional. Después son claramente machistas al preguntarles si
no había una española más guapa.
Defendiendo
la inexistencia de la violencia machista al considerarla "ideología de
izquierdas" y lanzando mensajes xenófobos y "machistas" (el mensaje
claramente lo es), Vox sigue tallando su imagen ante el electorado y los medios,
por un lado, y complicando a sus socios presentes y futuros, si es que los hay.
La
violencia no admite demasiadas consideraciones. Hay que condenarla sin tapujos
y, muy especialmente, tratar de evitarla, lo que es imposible si no se abordan
sus causas. En el caso de la violencia de género, hay unos patrones
medianamente claros que no dicen que se pueden y deben tomar medidas. También
que debe existir un consenso que Vox rompe. Ha hecho bien el alcalde de Madrid
de decirle que no es la pancarta de un "partido", sino del
Ayuntamiento, donde están todos. En cuanto al insultante tuit xenófobo y
racista, señalar que se ha dirigido contra una persona inocente cuyo único
delito es ser querida por su comunidad.
El
diario El País, con el titular "El pueblo que arropa a la reina ultrajada", tras señalar que el mismo VOX se
ha echado para atrás al ver las propias meteduras de pata, cierra su información
con el apoyo recibido por la joven en la población:
Han pasado varios días de mal tiempo y el
horizonte parece más limpio. Lo cuenta la afectada, ya con una media sonrisa:
“Estoy mejor. Me llaman los amigos, la gente del pueblo. Cada minuto, cada
segundo recibo un mensaje de apoyo. Siento que no he podido contestar a la gente”,
termina. Su reinado dura un año. Al pueblo aún le quedan oportunidades de
mostrarle su cariño.***
Y así
debe ser.
Parece
mentira que en España hayamos descendido a hacer
política con estas cosas, con víctimas de crímenes y con reinas de las
fiestas de los pueblos. Deberíamos aspirar a la paz y a la convivencia pacífica
de todos, pero hay quienes se empeñan en lo contrario, en dividir. Por favor, no sigamos
pulverizando la convivencia creando nuevos frentes absurdos, injustos y
retrógrados.
La
política es otra cosa. Todos los discursos se quedan en nada si no somos
capaces de ponernos de acuerdo en cosas obvias. Se dice que "para muestra vale un botón". Desgraciadamente tenemos muchos botones cada día. Dicen desde Vox que piden disculpas a la "joven española" (esta vez sí) y a su familia y que abren una investigación para aclarar los hechos. Pero los hechos son claros y el daño está hecho, como señalan en la misma página de VOX Otura en Facebook familiares y amigos de la joven.
Cuando se lanzan mensajes ambiguos no es fácil controlarlos todos y a veces salen a la calle algunos que se vuelven en contra. ¡Vete a explicarle a las bases recargadas los detalles y las sutilezas!
El efecto social negativo de estos mensajes es difícil de evaluar, pero está ahí. Es semilla de problemas futuros en tiempos que se esperan difíciles
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| Comentarios contra el Tuit de Vox a cargo de familiares y amigos |
* "Almeida y Ortega Smith discuten tras
el boicot de Vox al minuto de silencio contra la violencia machista" El
País 20/09/2019 https://elpais.com/ccaa/2019/09/19/madrid/1568891279_497867.html
** "Vox sobre la reina de las fiestas de
Otura: "No había una otureña española, y más guapa"" El Mundo
20/09/2019
https://www.elmundo.es/andalucia/2019/09/20/5d84850bfc6c833b708b45e0.html
*** "El pueblo que arropa a la reina
ultrajada" El País
20/09/2019https://elpais.com/politica/2019/09/19/actualidad/1568877400_027977.html
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