Joaquín
Mª Aguirre (UCM)
Estados
Unidos se encuentra ante una gran prueba. Debe aceptar o rechazar aspectos
esenciales de la definición de la política y la democracia. Podemos definir
ambos términos de muchas maneras, pero es importante que creamos en ellos. Hay
que separar al político imperfecto de la aspiración a una buena definición de
la política. En estos tiempos, es fácil encontrar justificaciones que
transfieren las debilidades humanas a las instituciones. Decimos, por ejemplo,
que "la democracia está corrupta" porque hay "políticos
corruptos". De esta forma, las instituciones cargan con las culpas de los
individuos, que ven sus defectos como propios del sistema, que les obliga a actuar así.
Estas
son las teorías cínicas —en sentido
coloquial— que nos inundan. Durante los siglos XVII y XVIII a la gente le dio
por preguntarse por qué estamos juntos,
sobre el sentido de la sociedad. Para
protegernos, dirán unos; porque nos falta algo sin los demás, opinarán otros;
porque todos nos beneficiamos... Habrá muchas respuestas, unas optimistas y
otras no tanto.
Con su "We the People of the United States" ya
establecían un sujeto de la Historia, se definían como conjunto y como
aspiraciones conjuntas tratando de distanciarse de los errores del pasado, de
los que huían. Los Estados
Unidos eran, sobre todo, unas aspiraciones humanas (no nacionalistas, sino
universales) bien definidas: «in Order to form a more perfect Union,
establish Justice, insure domestic Tranquility, provide for the common defence,
promote the general Welfare, and secure the Blessings of Liberty to ourselves
and our Posterity, do ordain and establish this Constitution for the United
States of America.» La
América de Trump está más aislada que nunca, es más agresiva y se ha vuelto
insolidaria. Trump pide a los norteamericanos (y al mundo) que acepten
un "new normal" que se aleja de sus propios principios.
La semana pasada, los periódicos norteamericanos y parte de
la prensa internacional dieron mucha importancia a un hecho aparentemente
trivial: la sustitución de Trump por su hija Ivanka durante la reunión del G20.
La ABC australiana describía y
comentaba el hecho:
Ivanka Trump has broken with protocol and
briefly taken her father US President Donald Trump's seat at the G20 leaders'
summit in Hamburg.
The US President had stepped away for a meeting
with Indonesian President Joko Widodo when Ms Trump, officially an adviser to
the President, took the seat between British Prime Minister Theresa May and
Chinese President Xi Jinping.
Absences at the G20 are usually covered by
high-ranking state officials. The President returned a short while later.
A White House official said Ms Trump, a senior
adviser, moved forward from the back of the room when the head of the World
Bank discussed topics particularly relevant to her.
A photograph of the "first daughter"
was tweeted by a member of the Russian delegation, before the tweet was
deleted.
A
deleted tweet from Svetlana Lukash with a photo of Ivanka Trump at G20.
"And replaces Pres Trump at the G20 table…"
First lady Melania Trump also had a notable G20
role — she was spotted at more than one of the President's bilateral meetings.
Jared Kushner, Ivanka Trump's husband and a
senior adviser, also was present in a number of the President's meetings.
It is all part of Mr Trump's family-focused
governing style that takes its cues from his decades running a family business.*
Más que una ruptura de protocolo es una imposición de otro
nuevo que, como se señala en el artículo, transfiere los de la esfera de los
negocios a la esfera pública. Romper el protocolo hubiera sido, por ejemplo,
que un funcionario de menor rango del acostumbrado hubiera sustituido al
presidente. Pero no se trata de eso, sino de la hija del presidente sustituyendo a su padre. Trump está imponiendo
a su familia como parte de su política de interpretación de los Estados Unidos
como una empresa administrada por su familia.
Los norteamericanos siempre han sido muy suspicaces ante estas prácticas pseudo monárquicas, esta especie de familias reales. Han
consentido a algunas, pero ninguna con el protagonismo mediático y político que
están teniendo la familia Trump. Que la hija del presidente, nombrada una
simple asesora, se siente junto al presidente chino y la primera ministra
británica es algo más que una ruptura de protocolo.
El protagonismo familiar de Trump tiene varias explicaciones.
La primera es el recelo. La desconfianza en los demás le lleva a confiar en sus
círculos más próximos, que son los familiares. Esto ya lo habían señalado como
una característica de su vida empresarial. Trump lo ha trasferido a la familia
haciendo retroceder los Estados Unidos a las formas tribales basadas en los
lazos de sangre y los establecidos por los matrimonios.
La segunda razón es la publicitaria. La familia Trump es un
gigantesco negocio familiar diversificado. Trump está promocionando a las
personas para promocionar productos. Eso afecta a las reuniones con los
dignatarios extranjeros en sus propios espacios hoteleros o la promoción de la
Trump Tower. La familia es imagen. En el futuro, los Trump encabezarán los
negocios asignados con el beneficio de la notoriedad adquirida. Las fotos de
Ivanka Trump junto a los grandes mandatarios internacionales se han conseguido
gracias a su padre.
El tercer motivo es más preocupante. La sospecha de que
Trump esté promocionando a la familia como futuros candidatos políticos a la
presidencia. La candidata más obvia es Ivanka Trump. Los hijos permanecen en la
sombra haciendo las conexiones en otros niveles.
El escándalo de esta semana está provocado precisamente por
los miembros que trabajan más en la sombra. El tema es, de nuevo, la
connivencia con Rusia para obstaculizar las posibilidades de Hillary Clinton,
que está claro era la candidata que el Kremlin no quería en la presidencia.
La columnista
Kathleen Parker (ganadora del Pulitzer en 2010) escribía —con el titular "The
future of the Trump presidency is in the hands of — wait, who is this
guy?"— en The Washington Post sobre el escándalo destapado por The New
York Times:
Whether Trump Jr. is merely stupid is yet to be
determined, but he wasn’t alone in that meeting. Joining him were his
brother-in-law, Jared Kushner, and Paul J. Manafort, then Trump Sr.’s campaign
manager, who is known to have had business dealings in Russia for a number of
years.
The New York Times broke the story over the
weekend, reporting that three (unnamed) individuals had corroborated the
existence of the damning emails, which clearly establish intent to “something.”
Tuesday afternoon, Trump Jr. released the email thread between him and some guy
— named Rob Goldstone — a music publicist who knew some guy who knew Donald
Trump vis-a-vis the Trump-owned Miss Universe contest. Got that?
Goldstone arranged the meeting, which took
place in Trump Tower in June 2016 — just before the Republican primary season
had ended — to talk about dirt on the presumptive nominee’s general-election
opponent. After Goldstone said that the Russian lawyer, Natalia Veselnitskaya,
had information that would incriminate Clinton, Trump Jr. replied that he’d
“love it.” Who wouldn’t? You’re the namesake son of the man on track to become
the Republican nominee and possibly president — and Russia wants to help him
win? Hell da !**
¿Es menos representante
de su padre Ivanka Trump en la reunión del G20 que su hijo Donald Trump Jr.? La
pregunta se deriva del mismo principio asentado por Trump al convertir a su
familia en equipo de gobierno.
Las perversiones se acumulan y afectan a los principios
desarrollados por la familia frente a los constitucionales. El "America
First", convertido en grito de guerra se convierte en mero eslogan cuando
se produce la "connivencia" —palabra sobre la que giran todas las
acusaciones contra Trump, su equipo y familia— con la Rusia de los intereses. No
es una casualidad que todas las personas que han ido desapareciendo del
panorama lo hayan hecho por tener lazos demasiado evidentes con Rusia.
Los argumentos defensivos diciendo que todo el mundo escucha
informaciones sobre tus rivales políticos entra dentro del cinismo antes
citado, pero —sobre todo— colisiona frontalmente con los principios básicos de
ese "We The People" que pasa a tener una naturaleza distinta cuando
las informaciones vienen de un rival histórico que también elige su propio
candidato y aporta su ayuda para evitar que salga el otro.
Connivencia y familia son dos conceptos que juegan
aquí juntos porque el protagonismo dado a su familia se muestra en la
representación pública (Ivanka) y en la secreta (Donald Trump Jr. y Jared Kushner).
En cualquier caso, fue el propio Trump el que solicitó la intervención de Rusia
y de Wikileaks durante su campaña. Todo el mundo pensó que lo hacía
retóricamente. Luego se vio que no.
Cuanto mayor protagonismo da a su familia, más sensible es a los problemas que se deriven de ella. El "We the Family" tendrá efectos muy negativos para Trup y para los propios Estados Unidos que, como Mark Twain se temía, se acabará pareciendo a una monarquía con una familia reinante al frente. Las "dinastías" empresariales no son bien vistas en la política democrática. Trump ha mezclado negocios y política con la familia. Lo que hacía en el mundo empresarial era cosa suya. Pero Trump no está al frente de una empresa —aunque él piense que sí— sino del gobierno de un pueblo. Le han elegido a él, no a su familia. Y lo debían decidir los norteamericanos, no los rusos.
Algunos argumentarán que esta última y escandalosa
circunstancia se anticipó en la campaña y que por esto mismo el
electorado sabía que él pedía la connivencia rusa. Hay explicaciones para todo,
efectivamente. Pero si la democracia se justifica en explicaciones perversas y
se identifica la política con las
conductas inmorales, aunque digan que no es delito, le hacen un flaco servicio.
*
"Donald Trump's daughter Ivanka sits at G20 leaders' table after launching
women's initiative" ABC (Australia) 9/07/2017
http://www.abc.net.au/news/2017-07-09/ivanka-replaces-donald-trump-at-g20-leaders27-table/8691106
**
"The future of the Trump presidency is in the hands of — wait, who is this
guy?" The Washington Post 11/07/2017
https://www.washingtonpost.com/opinions/the-future-of-the-trump-presidency-is-in-the-hands-of--wait-who-is-this-guy/2017/07/11/8b3ec0c0-667e-11e7-8eb5-cbccc2e7bfbf_story.html
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