Joaquín
Mª Aguirre (UCM)
A veces
parece que no pensamos demasiado lo que las cosas implican y es muy fácil
proponer pero menos realizar. Digo esto por la iniciativa del Partido Popular,
vía su portavoz en el Congreso de los Diputados, el señor Hernando, y que el
diario El País recoge con el siguiente titular "El PP propone medidas en
el Congreso contra las noticias falsas en la red".
Como
toda cruzada destinada a erradicar el mal en cualquiera de sus versiones,
existe una gran distancia entre el deseo y la realidad. Estamos de acuerdo en
que las noticias falsas, como todo aquello que sea "falso", no deberían
existir. Sin embargo, la existencia de cualquier institución que corra más que
su sombra está destinada al fracaso. La mentira corre que se las pela, mientras
que la lentitud de la justicia es proverbial.
El
diario El País señala el deseo del partido:
El Partido Popular ha presentado este martes
una iniciativa en el Congreso de los Diputados para impulsar medidas que
garanticen la veracidad de las informaciones que circulan por Internet y así
“evitar injerencias que pongan en peligro la estabilidad institucional de
España”.
En esta proposición no de ley, según ha
explicado el portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, incluye cuatro
líneas de actuación que implican al Gobierno, instituciones públicas
especializadas, proveedores de servicios e infraestructuras de Internet, medios
de comunicación, usuarios y asociaciones.*
No sé
si se trata de una broma lo de las "cuatro líneas", pero pudiera
serlo. Las instituciones públicas especializadas ¿en la verdad? No
entiendo muy bien el funcionamiento
aunque entienda el concepto general. Tampoco entiendo el concepto de
"peligro de la estabilidad institucional de España" que me parece
rimbombante pero hueco, mucho ruido y nada más. La extensión a los "proveedores
de servicios e infraestructura de internet" es pedirles que sean ellos los
que determinen si lo que circula por millones por minuto en las redes es verdad
o mentira o perturba la estabilidad de alguien. La parte final también es una
especie de brindis al sol con lo de la "comunicación, usuarios y asociaciones".
¿Queda
lago? Sí, los mentirosos. En realidad son los únicos que cuentan ya que son los
que hacen y ponen en marcha el mecanismo. Los demás son meros comparsas o cómplices
involuntarios desde su buena o mala fe.
Por
ejemplo, todo el mundo está de acuerdo en que el Brexit se produjo tras una
serie de mentiras continuadas, muchas de ellas perfectamente verificables que
crearon una opinión errónea en muchos británicos que creyeron las mentiras que
les contaron sobre los beneficios de la salida de la Unión Europea. ¿Y qué?
Por
ejemplo, las ex autoridades catalanas dijeron a los que salieron a participar
en el referéndum ilegal que era legal
o que Europa les recibiría con los brazos abiertos y que iban a ser más ricos. Todo
era falso y lo sabían. ¿Y qué?
Por
ejemplo, el señor Donald Trump estuvo mintiendo durante toda su campaña
electoral; pese a ello ha llegado a ocupar la Casa Blanca. Una vez en ella, los
medios reproducen el número de mentiras que dice diariamente desde su primer
día siendo presidente. Puestos a desestabilizar, lo ha hecho con medio mundo
simplemente por decidir cambiar la capital de Jerusalén mientras dice seguir
apoyando el proceso de paz en la zona. ¿Y qué?
En los
tres casos expuestos, una parte importante quiere vivir con esa mentira. Aman
sus mentiras y rezan porque les cuenten nuevas e interesantes mentiras cada día.
Sin ellas, el mundo les parece aburrido y sin colores.
¿Cuáles
son las medidas que el señor Hernando proponer para combatir las mentiras en el
mundo? Hay mentiras a corto, mediano y largo plazo. Contra las primeras hay
poco que hacer porque son demasiado rápidas y cuando te quieres dar cuenta ya
se te han colado. A mediano plazo ya has perdido porque las ha escuchado todo
el mundo. Y a largo plazo no merece la pena molestarse porque ya habré otras
nuevas más eficaces.
Lo de mentiras que desestabilicen es gracioso
porque es como prohibir los terremotos que estén por encima de 7'5 en la escala
de medición. Dice el texto de la noticia:
La propuesta, que deberá ser debatida por el
pleno de la Cámara, insta al Gobierno a elaborar métodos que puedan determinar
la veracidad de las informaciones que circulan por la red y que esos métodos se
traduzcan en medidas de acción para detectar esas informaciones y su “sellado”
o descalificación como potencial noticia falsa.
Asimismo, plantea que se introduzcan
“sistemas de vigilancia, monitorización, mitigación y respuesta” en los
servicios de seguridad pública ante “acciones extranjeras que hayan sido
destinadas a cuestionar y debilitar la confianza en las instituciones públicas
y, en general, lo valores democráticos”.
La iniciativa urge al Ejecutivo a que
promueva la colaboración, la cooperación y la búsqueda de un acuerdo global
contra la desinformación como amenaza global para los sistemas democráticos.
“Especialmente”, defiende el proyecto, “si se trata de una amenaza gestionada
por actores extranjeros con intenciones hostiles”, exigiendo medidas
específicas para “proteger escenarios sensibles como los procesos electorales”.
Para hacer frente a esas campañas de desinformación “con intenciones hostiles
contra países de la Unión Europea”, propone que se refuerce la comunicación
estratégica.*
¿Insta?Es de
una ingenuidad pasmosa eso de "elaborar métodos que puedan determinar la
veracidad de las informaciones", y además que se apliquen, no se vayan a quedar en nada. Quizá deba sonar una
alerta de esas que escuchamos en las películas de submarinos para que todos
acudan a sus puestos de combate.
No sé
si lo que pide el señor Hernando es posible o es solo una quimera mecánica, una
máquina de la verdad con lucecitas y un embudo en la parte superior para los echar
artículos y ver como parpadean las luces rojas y verdes. "Esta sí, esta no.
Esta sí, esta no". Habría que pedirle al señor Hernando alguna ayudita
sobre cómo escapar a las mentiras, medias verdades e insinuaciones y rumores
que determinan el tejido de la opinión, tan sensible a lo que les llega. Contra la mentira, la verdad, remedio que no gusta a muchos asesores.
Quizá
haya que recuperar la noticia de este verano:
Twitter lleva casi un año a la venta sin
encontrar comprador. Google y Disney son solo dos de las empresas que han
tanteado el terreno sin llegar a ejecutar la operación. Ahora ha aparecido un
inesperado actor con una peculiar intención: comprar la red social para
suspender la cuenta de Donald Trump, desde la que el presidente publica
polémicos mensajes.
Valerie Plame es una ex agente de la CIA
conocida por haber sido el escándalo conocido como "Plamegate",
después de que su identidad como operativo de la agencia fuese revelado en 2003
cuando se encontraba en Niger investigando las posibles conexiones de la
industria del uranio y el régimen de Sadam Hussein. La filtración condujo a una
serie de juicios en los que se llegó a denunciar a Dick Cheney, aunque el juez
desestimó esta demanda.
Ahora la agente se ha puesto un nuevo
objetivo: retirar uno de los altavoces a Donald Trump. "Si los ejecutivos
de Twitter no cierran el odio y la violencia de Trump, entonces es nuestra
obligación", tuiteó con los hashtags #BuyTwitter (compra Twitter) y #BanTrump
(bloquear a Trump). Para ello, ha puesto en marcha una campaña de crowdfunding.**
Al menos
ella tenía un plan. No era fácil, pero —con todo— es más factible que lo del
señor Hernando, quien se limita a pedir sin ofrecer alguna idea al respecto.
Parece más bien que, sin tener idea, se ha limitado a lanzar su noticia para
hacer ver que se hace algo. La guerra informática es complicada y sin muchas
contemplaciones. Si te tienes que parar a ver si es verdad o mentira lo que
cuentan, ya has perdido la iniciativa y te han marcado el gol. En un pispás ya
está la mentira en boca de todo el mundo. Y ya desde ahí es imparable porque la
repetirán todos aquellos a los que atraiga.
El
problema ya no es si es verdad o mentira, que es lento y problemático,
según de lo que se trate. Lo importante es cómo se frenan las iniciativas de
intervención de países, grupos o personas que tienen en mente realizar algún
tipo de acción que cree el caos informativo durante el tiempo necesario como para
"desestabilizar". No es sencillo porque son profesionales de estas
cosas.
La
mentira no se ha inventado hoy y los mentirosos no han nacido ayer. La tecnología
es solo una parte. Cuidado con la situaciones visionarias de creer que es
posible hacerlo así. Cualquier medida restrictiva tendrá en contra a los que se
vean perjudicados, que serán muchos.
Estas
cosas siempre acaban mal. Acaban con acusaciones de censura, actos de autoridad
y críticas generalizadas y defensa de la libertad de expresión. Aquí hemos criticado muchas veces el error del gobierno egipcio al trata de de instituir
la verdad oficial y exigirle a los medios que no se aleje de ella. No tendría
sentido hacer lo mismo. La denuncia de la mentira y realizar auténticos debates
sociales, explicando ideas y proyectos son mejores soluciones. Educar en la verdad y menos mentirosos sueltos, igualmente ayuda. Recurrir a censuras, bloqueos, etc. es intentar ponerle puertas al campo.
*
"El PP propone medidas en el Congreso contra las noticias falsas en la
red" El País19/12/2017
https://politica.elpais.com/politica/2017/12/19/actualidad/1513701045_706871.html
**
"Una exagente de la CIA quiere comprar Twitter y evitar que Trump lo
use" El Español 24/08/2017 https://www.elespanol.com/social/20170824/241476040_0.htmlhttps://www.elespanol.com/social/20170824/241476040_0.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.