Joaquín
Mª Aguirre (UCM)
El panorama
egipcio tras el ataque a la mezquita sufí de Rawda muestra una extraña mezcla
de silencio oficial —la edición de hoy de Ahram Online no destaca ya ninguna
información— y algunas secuelas. No es fácil acallar el dolor ni silenciar las
opiniones que acaban saliendo por las heridas. Lo que ha sido el peor atentado
de la historia egipcia, su 11-S, como algunos lo han llamado, parece condenado
a no ir más allá del luto oficial de tres días.
Pero hay
voces que siguen planteando preguntas. Las más evidentes, como ya señalamos,
era las que recordaban que los terroristas habían advertido del ataque, que la
amenaza existía y que pese a ello actuaron con la más completa impunidad. Luego
están las críticas desde el exterior, como los artículos en The Guardian, ante
las que el gobierno reacciona de forma furibunda.
Pero lo
más serio es lo que se está produciendo con la Universidad de Al-Azhar, que
lleva tiempo en el punto de mira del gobierno y esta vez debe explicar ciertas
actitudes ante los terroristas y el atentado. No es la primera vez que esto
ocurre, pues se le exige con frecuencia que declare a los terroristas fuera de
la religión, algo que no se ha producido. El bárbaro atentado, con sus 308
muertos (últimos datos), habría sido una buena ocasión para hacerlo, pero la
institución guía del mundo musulmán se resiste a hacerlo.
Con el
titular "We cannot declare Rawda mosque attacks infidels: Azhar spokesman ".
Egypt Independent recoge
este conflicto:
Al-Azhar spokesman Abbas Shuman said that the
al-Rawda mosque attackers had “exposed themselves” of having no religion by
carrying out the attack and that no one, including Al-Azhar, should therefore
not need to accuse them of being non-Muslim infidels.
In a phone call to the television show “Hadrat
Al Mowaten” (Your Excellency the Citizen), Shuman accused the terrorists of
being “hired to destroy Egypt”.
Responding to a question as to why al-Azhar has
not declared the attackers as infidels, Shuman said, “it is not within the
power of Al-Azhar to declare the attackers of Al-Rawda as infidels. Al-Azhar
does not judge people, because this opens doors we cannot close.”
The statement prompted a forceful response from
prominent television presenter Amr Adib, who issued a vicious attack against
Al-Azhar, saying, “why aren’t you declaring them as infidels? Don’t you realize
these people have millions of followers who they convince of their ideas using
the Quran and Sunna [sayings of the prophet]?”
Others have also criticized Al-Azhar for its
stance. On Saturday, a series of Al-Azhar scholars together with a host of
political and social movements, urged the religious institution to issue a
declaration against the attackers to brand them as infidels.
“The crimes of these terrorist groups have
crossed a red line. Destroying houses of God is a major crime. Al-Azhar has to
issue a strong response to these people by declaring them as infidels,” a
statement by a variety of societal currents read.
Meanwhile, religious groups, including Sufi
orders, have announced the launch of a religious campaign, demanding the
Islamic State to be declared as infidels.
Sheikh Alaa Abu Al-Azaem, head of World Union
for Sufi Orders, stressed that the members of the Islamic State are not Muslims
because of their anti-Islamic views , which he described as “destructive”.
In response to the critics, Al- Azhar called
for an urgent meeting with the country’s prominent Islamic leaders to discuss
whether or not to issue a “fatwa” declaring Daesh as infidels.*
El entramado es complejo, pero era evidente que la institución
de Al-Azhar acabaría siendo señalada críticamente ante su resistencia a
declarar "infieles" a los terroristas del Estado Islámico y de los
que se han adherido a su programa. Es la prueba más evidente de que por mucho
que se quiera ser políticamente correcto, los primeros que entienden que es una
cuestión "religiosa" son los propios musulmanes que quieren que la
barbarie de las acciones, su monstruosidad continua, sea expulsada de la
comunidad religiosa declarándolos infieles. Ya no es solo una cuestión
"ética": nadie quiere verse arrastrado por la consideración de que
son miembros de una misma religión, que siguen un mismo Libro, por decirlo así.
Si los terroristas asesinos tienen el mismo estatus que las
personas de bien, ¿dónde está la diferencia? Si los terroristas pueden seguir
esparciendo su mensaje de que ellos son los verdaderos creyentes y que se
limitan a cumplir los mandatos del Corán, ¿qué ocurre con el resto? No se trata
de otra cosa y se le exige al Al-Azhar que lo deje claro, una "strong
response", como se señala. Pero la institución se resiste.
Creo que esta presión va más allá del pulso mantenido con el
gobierno sobre la llamada "reforma del discurso religioso", una
fórmula vaga que puede afectar a muchas cosas. En este caso lo que se pide es
muy claro y sencillo: la declaración de infieles de los asesinos y del Estado
Islámico. Pero la tendencia de Al-Azhar suele ser nadar y guardar la ropa o, si
se prefiere, sostener lo insostenible.
La declaración de que los terroristas se retratan con sus
propias acciones es insostenible y vergonzosamente cobarde ante las claras
exigencias de la población. Se les apela, además, desde otra idea: la
destrucción de Egipto mediante una conspiración. No debe ser ese el argumento
—el que trata de meter al nacionalismo en ello—, sino la barbarie. La crueldad espantosa
del acto, su explicación como una forma "legal" de hacer cumplir la
ley mediante el castigo, debería ser suficiente se produjera donde se
produjera. No es necesario recurrir al ego nacional porque eso lo haría menos
grave si se hiciera más allá de las fronteras propias. Y no es el caso.
Para muchos es irritante la actitud de Al-Azhar, pero otros
afean que esta presión sobre ellos se realice cuando los crímenes afectan ya a
la comunidad musulmana y que no se hayan valorado de la misma forma otras
vidas, como ocurrió en el caso de los coptos. En este sentido, un incidente en
los propios medios ha llevado a la polémica en estos días con la periodista y
presentadora Rasha Magdi. Egypt Independent lo recoge con el siguiente titular "Egyptian
TV host suspended over comments on N. Sinai mosque attack":
Owner of Sada al-Balad Media Group Mohamed Abu
al-Enein has suspended one of its TV hosts Rasha Magdi and referred her to an
internal investigation over inappropriate comments she made on air regarding
Friday’s terrorist attack on the al-Rawda mosque in North Sinai.
Magdi went off script during her show on the
privately-owned Sada al-Balad TV channel on Friday, describing terrorist
attacks against the army and police as “mutual violence,” while suggesting that
attacks against Christians are more understandable than attacks against
Muslims.
“We saw attacks by terrorists on the police and
army, and we said this is mutual violence. These extremist groups have attacked
churches and we said that they think it is a [different] religion, not Islam,
and it is hostile to them, and then we said it is okay, but how [can these groups
attack] Muslims?,” Magdi said.**
Los comentarios no han gustado nada y se ha recordado que
ella fue una de las voces en el caso denominado la "masacre de Maspero",
en el que cristianos coptos fueron atacados por las fuerzas de seguridad cuando
protestaban pacíficamente por la quema de una iglesia en Asuán en noviembre de 2011,
uno de los episodios más oscuros.
Sin embargo, creo que lo que ha hecho Magdi es interpretar el
famoso poema erróneamente atribuido a Bertolt Brecht "Primero
vinieron..."***, obra del pastor Martin Niemoller, sobre cómo la Alemania
de Hitler miró para otro lado ante la barbarie hasta que esta llamó a sus
propias puertas. Lo que recrimina Rasha Magdi es la indiferencia social ante la
muerte de policías y militares ("es su trabajo"), los coptos
("son de otra religión") hasta que llega la hora de las mezquitas, en
cuyo caso la gente salta indignada.
Se ha interpretado como un "ataque a los coptos"
ya que se ha entendido que son "diferentes". En el medio Watani Net,
copto, se recoge como un ataque a los cristianos egipcios y se señala:
Ms Magdy said, as she posed her question on the
reason behind the attack: “I can’t imagine or grasp what happened! We have
heard about attacks by terrorists against the military and police, and it came
under the pretext of an ‘exchange of violence’; also of attacks against Copts
and their churches, and we considered it directed at non-Muslims, the followers
of another religion and seen as their enemies. But [now they attack] Muslims!
how could they?!” The remark brought Ms Magdy under fire; it was generally seen
as an unacceptable slur against Copts.****
Al margen de otra circunstancia, el texto pretende ser irónico,
recogiendo más que su opinión las voces sociales que se distancian de los
acontecimientos en función de la proximidad. Lo que ha irritado es precisamente
señalar la falta de unión frente a lo que se presenta como una sociedad
monolítica.
El "un solo pueblo" es un ideal que se contradice
muchas veces por las marginaciones reales. Ayer leíamos la sensación de abandono y
discriminación que sentían los beduinos de la zona del atentado de la mezquita
ante el tratamiento que se hacía habitualmente de ellos. Los propios coptos se
han quejado en ocasiones de lo mismo. Pero los discursos oficiales deben
ignorar esta división social. No creo que la intención de Magdi fuera el ataque
a los coptos como mostrar la hipocresía social. Es esa misma hipocresía la que
convierte sus palabras en ofensivas para los coptos. Por su parte, ella señala
haber sido malinterpretada en su
página de Facebook.
Ya se percibía en algunas opiniones —lo señalábamos ayer— el
hecho de que no todos los muertos eran sufís, que sería un grado más de
distancia dentro del autoengaño que permite creer que puedes llegar a no ser objetivo
para los terroristas. Pero como se ha visto, una vez puesta en marcha la
violencia, la distinción entre sufís y no sufís no sirve para salvar la vida.
La exigencia a Al-Azhar a que los declare
"infieles" es para meterlos en otra categoría. Pero no solo son
"infieles", que hay muchos, sino "infieles asesinos", en
donde lo relevante es lo segundo. Es su "cruel inhumanidad" lo que
les hace estar fuera de cualquier grupo o fe. Los "infieles" que no se meten con nadie no estarán muy convencidos de que se les meta en la misma categoría que los asesinos. Pero tampoco les van a preguntar. Es el peligro de etiquetar negativamente a los que no son como nosotros. Lo esencial es que unos matan y otros mueren y la condena absoluta de la violencia y de su origen. La retirada clara de la "etiqueta religiosa" a los militantes, señalan algunos, les restará "seguidores". Está por ver, pero sería un gesto.
La Universidad de Al-Azhar tendrá que pagar su tributo futuro, pues a todos llega el momento
en el que el peso de las incongruencias en la mochila nos hace doblar la
espalda.
* "We
cannot declare Rawda mosque attacks infidels: Azhar spokesman" Egypt
Independent 26/11/2017
http://www.egyptindependent.com/we-cannot-declare-rawda-mosque-attacks-infidels-azhar-spokesman/
**
"Egyptian TV host suspended over comments on N. Sinai mosque attack"
Egypt Independent 26/11/2017
http://www.egyptindependent.com/egyptian-tv-host-suspended-over-comments-on-n-sinai-mosque-attack/
*** Poema del pastor Martin Niemoller:
«Cuando los nazis vinieron a
buscar a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista.
Cuando encarcelaron a los
socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata.
Cuando vinieron a buscar a los
sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista.
Cuando vinieron a por los judíos,
no pronuncié palabra,
porque yo no era judío.
Cuando finalmente vinieron a por
mí,
no había nadie más que pudiera
protestar.»
****
"TV PRESENTER, AGAIN, MAKES ’INAPPROPRIATE REMARK’ AGAINST COPTS"
Watani Net 28/11/2017
http://en.wataninet.com/coptic-affairs-coptic-affairs/sectarian/tv-presenter-again-makes-inappropriate-remark-against-copts/22094/
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.