Joaquín
Mª Aguirre (UCM)
Si uno
quiere olvidarse de Donald Trump por unas horas, días quizá, la mejor solución
es sumergirse en la prensa egipcia. Mientras todos los medios mundiales le
dedican titulares de todos los tamaños y colores, la prensa egipcia parece
preguntarse ¿Trump, quién es Trump? dedicándole poco o ningún espacio. En todo caso, una extensión informativa muy inferior a lo que otros dedican estos días a los acontecimientos tras la toma de posesión.
Hemos comentado ya el vaciado de temas demasiado conflictivos y el
descenso de la crítica tras la aprobación de la ley de medios que dejaba al
descubierto a profesionales y empresas. Con todo y con ello, es sorprendente
que Trump, omnipresente para el mundo a través de los medios, instituciones y protestas, tenga tan poco protagonismo ante cuestiones
que afectan directamente al mundo musulmán.
Sin embargo, ahora
dedican sus páginas al fútbol —¡la final de la copa africana!—, el squash y
cosas tan fascinantes como que las hamburguesas Big Mac de El Cairo son las más
baratas del mundo.
Hay que rebuscar para encontrar a Donald Trump. La noticia
que daba ayer Ahram Online, por ejemplo, "Trump fumes, vows to act, after
judge lifts travel ban" es un texto íntegro de Reuters, lo que implica que
no se ignora al mundo, pero no se quiere escribir de él. Sí, en cambio, se da
una breve noticia de lo que no se puede ignorar: la situación en el aeropuerto
de El Cairo. Este fue el aeropuerto del que salió la primera noticia
internacional de que se había impedido embarcar a los afectados por la
prohibición de Trump. En Estados Unidos se prohibía entrar, pero en Egipto fueron
los primeros en impedir salir. ¡Qué eficacia!
Rebusco
en cinco publicaciones egipcias distintas y Trump prácticamente ha desaparecido. Solo indirectamente,
como es la cuestión del aeropuerto y los visados, o con el foco en otros
aspectos distintos a la cuestión de la prohibición. Estos son dos de los titulares encontrados: "Cairo
Airport to Allow Travellers from ‘Visa Banned’ Countries to Fly to United
States" (Egyptian Streets
4/02/2017) y "Trump ignites political fight over US banking law
reforms" (Egypt Independent 4/02/2017). El primero es un aviso para
los que puedan ir; el segundo se deriva hacia la cuestión económica. No se habla
de la cuestión de la prohibición de entrar a los ciudadanos musulmanes.
No solo
es difícil encontrar a Donald Trump. Las manifestaciones contra las
prohibiciones en los Estados Unidos y por todo el mundo también han
desaparecido como por arte de magia. Por supuesto, nadie se ha manifestado en
Egipto en solidaridad con los siete países musulmanes a los que se les prohíbe
entrar en Estados Unidos.
El
ferviente antiamericanismo egipcio parece haberse diluido por arte de magia.
Las teorías conspiratorias, la islamofobia, el agravio contra los árabes, etc.,
todo ello se ha desvanecido. Los largos artículos explicando cómo América había
creado al Estado Islámico, las sesudas reflexiones sobre los intereses de los
Estados Unidos por promover la desunión entre los árabes, etc. etc. brillan por
su ausencia.
Me
asalta la duda de si esto es solo una "cuestión egipcia" o si afecta
a otros países musulmanes. Voy en busca de otra prensa árabe. En Emirates 24, por ejemplo, se regresa a
la normalidad: Su "Big Story" es "At least 2,000 march on
Trump's Florida resort". No es la única. De las seis que componen la
selección del "big story", tres son sobre Donald Trump, la señalada,
otra sobre la petición a los líderes religiosos que "recen" por
Arnold Schwarzenegger y una más sobre cómo será el tema central en la reunión
de los líderes europeos. Por el resto de la página se reparten más noticias
sobre Trump. Entro en el portal informativo jordano Albawaba e igualmente las noticias se multiplican. Aquí también
existe Donald Trump. Igualmente en The
National, de los Emiratos, Trump se encuentra presente y su noticia
principal en estos momentos es sobre el conflicto abierto por Trump con Irán y
un artículo destacado "Malicious travel ban creates hate and division",
en el que se recogen las protestas. Hay también otras informaciones con Trump y
sus efectos sobre el mundo. En Naharnet,
de Líbano, no solo hablan de la decisión del juez federal de tumbar la orden de
Trump, de la renuncia a presentarse al cargo de Vincent Viola o de las
decisiones sobre economía, sino que informan también de la guerra que el rapero
Eminem le ha declarado a Trump y de las críticas de artistas como Angelina Jolie o de las acciones de Coldplay en favor de los refugiados..
Entonces,
¿qué pasa con Egipto? Egipto se ve atrapado en un callejón
en el que se ha metido él mismo. Ignorar lo que hace Trump, silenciarlo, no va
a arreglar ningún problema egipcio, pero sí le va a crear nuevas
complicaciones. Todo lo que se construya alrededor de Trump se puede venir
abajo en cuestión de segundos.
La apuesta del presidente Sisi por Donald
Trump es un gran error. Es cierto que no tiene mucho donde elegir, dados los
errores continuos que ha tenido en materia internacional. Pero la apuesta por
Trump le creará nuevos conflictos dentro y fuera. Ya ha ocurrido en Naciones
Unidas por hacer caso a las llamadas de Trump. Todo el mundo árabe le señalaba
con el dedo. Las pretensiones constantes de liderazgo por parte de Egipto son
una fantasía cada vez más lejana en la medida en que no podrá ejercer ese papel
sin criticar las medidas contra los musulmanes de Trump. Por
mucho que se silencien los conflictos y su guerra con el mundo, estos no se van
a poder evitar. Una vez más. Egipto esconde la cabeza para no ver los
problemas.
La
esperanza de que Donald Trump se acerque a abrazar al presidente Sisi y
mostrarse ante la población como un líder con amigos poderosos está en
contraste con su creciente debilidad interna. La economía no tiene visos de cambiar
y esto no se arregla como está previsto con un cambio ministerial. Las promesas
se deben cumplir en algún momento. El anunciar
la llegada de soluciones y apaños en los próximos meses tiene un coste y, sobre
todo, un peligro: que no se cumplan.
Pero
los gobiernos egipcios han desarrollado un instinto clave para compensar su incompetencia,
el truco de los grandes bancos: ser
demasiado grandes para caer. En términos políticos significa que los
problemas no se solucionan nunca porque tampoco es muy necesario. Ya vendrá
alguien al rescate. Pero no siempre
tiene porqué ser así.
Hoy el
mundo entero es un clamor contra Trump. Solo le jalean los ultraderechistas
europeos que tienden más bien a la islamofobia, como el líder holandés Geert Wilders o
la propia LePen, que se ven con la espada flamígera limpiando el continente. Lo
hacen también los enemigos de Europa, como se ha declarado la señora May, como
loca por alcanzar el liderazgo mundial. Tiene ya casi dos millones de firmas
pidiendo que Trump no visite el Reino Unido y si se pasa finalmente por
Londres, le espera una buena recepción.
El
presidente habrá estado al borde del infarto al saberse que el terrorista del
Louvre era de nacionalidad egipcia. Eso no es buena noticia para Sisi porque no
quiere verse en el punto de mira. Puestos a prohibir, ¿por qué no ocho países
en vez de siete? Solo falta que la estrategia islamista sea aumentar los
conflictos con los coptos, ya de por sí elevados. No le valdrá al presidente
que el Ejército egipcio haya arreglado la catedral tras el atentado. Incluso el
papa copto, Tawadros II, pidió este verano que los coptos de Estados Unidos no
se manifestaran ante la Casa Blanca pese a los ataques sectarios que sufrían en
Egipto. Ahram Online recogía entonces: «The
pope argued that such demonstrations do not help or change the situation, but
instead "stain the image of Egypt locally and internationally,"
adding that Egyptians are now capable of dealing with their problems and its
consequences.»* No sé si se lo agradecerán lo suficiente. Hoy, con Trump en la Casa
Blanca, los efectos de las protestas de los cristianos coptos por los ataques
que reciben son impredecibles. Egipto prefiere pasar desapercibido y, a ser
posible, como "modernos" y "reformistas", lo que explica el
enfado del presidente al-Sisi con los clérigos de la Universidad de Al-Azhar,
que se resisten. Pero los verdaderos modernos y reformistas están encarcelados o silenciados. Estas cosas acaban
pasando factura. Ahora es cuando se echa de menos tener voces creíbles hablando
de la modernización de Egipto y no de sus antigüedades.
Tener a
Donald Trump como un amigo y, de una forma u otra, poner el destino del país en
sus manos tiene un coste elevado. Te hace más vulnerable ante los enemigos y te
puede quitar algunos amigos importantes como Trump siga en esta línea. Todo lo
que sabemos es que no suele cambiar a menudo.
No sé
cuánto tiempo podrá ignorar la prensa egipcia los efectos de las acciones o las
palabras de Trump. Aquellos artículos con los que los medios analizaban sus
posturas tras el encuentro de septiembre en Naciones Unidas ya no son tan
fáciles de escribir por la incertidumbre y el riesgo que asume quien lo firma. No
se pueden ignorar riesgos como el que se abre con la escalada con Irán, la
embajada en Jerusalén o la intervención militar en Yemen para tener su propio
terrorista cazado.
Así que es preferible, han decidido algunos, hablar poco de
Trump, que se quede esa imagen del presidente al-Sisi y su discípulo Donald
Trump escuchando los sabios consejos que le transmiten. "Un líder
fuerte", dijo el presidente egipcio tras el encuentro con el entonces
candidato y hoy presente en todos los periódicos del mundo.
Lo más irónico de todo esto es que la orden de Trump para prohibir la entrada de ciudadanos musulmanes esta sirviendo para despertar un movimiento de solidaridad hacia el mundo musulmán y dejando aislado a los terroristas. Allí donde Trump mete a países enteros, la prensa va mostrando los casos individuales de las personas a las que se les impide entrar en los Estados Unidos. Familias que se reagrupan, traductores iraquís del ejército norteamericano a los que no se les reconoce sus servicios, niños que van a operarse. Con cada caso, aumenta el clamor por la injusticia que supone este tipo de prohibiciones masivas. Es una buena idea que la gente construya los puentes cuando otros construyen muros.
Por eso es tan absurdo el silencio egipcio. Están perdiendo una oportunidad enorme de entrar en el juego y no quedarse fuera en una arriesgada relación con Trump. Egipto tiene lazos fuertes con las administraciones norteamericanas, es cierto, pero también las tenía con Obama y eso no le libró de grandes campañas y manifestaciones callejeras en su contra. Ahora que se convierte a países enteros en terroristas y no en sus víctimas, Egipto vuelve a hacer la elección equivocada.
El atentado del Louvre ha debido causar pánico en el gobierno egipcio. Que su autor fuese un egipcio de 29 años complicaba la imagen del país y podía irritar a Trump. El autor del ataque había entrado en Francia con visado turístico. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ha dado su
opinión rápidamente sobre el atentado explicando que no suponen "ninguna tensión" entre los dos países:
“Terrorism doesn’t show preferential treatment
between countries, peoples and religions; everyone is targeted,” Abu Zeid said
in a phone call with Al-Hayah TV channel.
He said that Egypt is one of the first victims
of terrorism and that “everyone is targeted by terrorist attacks, whether [they
are] Egyptian, French or [citizens of] all other countries.”**
Una opinión interesante, pero es la diametralmente opuesta a
la de Donald Trump, la que ha sido aplicada a siete países por ser quienes son y por su religión. También ellos son víctimas de los terroristas, pero eso no le importa a Trump. Ya sabemos: "América First!". La doctrina del portavoz egipcio se puede aplicar a todos los demás países que son injustamente tratados y etiquetados como "terroristas".
Es una lastima que teniendo las ideas tan claras no se digan más a menudo y más alto. Puede que luego sea tarde.
*
"Pope Tawadros urges Copts in US not to demonstrate over sectarian attacks
in Egypt" Ahram Online 2/08/2016
http://english.ahram.org.eg/NewsContent/1/64/236708/Egypt/Politics-/Pope-Tawadros-urges-Copts-in-US-not-to-demonstrate.aspx
** "No tension between Egypt and France after Paris attacker identified as Egyptian: Ministry" Ahram Online 5/02/2017 http://english.ahram.org.eg/NewsContent/1/64/257599/Egypt/Politics-/No-tension-between-Egypt-and-France-after-Paris-at.aspx
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