Joaquín Mª Aguirre (UCM)
Ese
"buen tiempo", ese "calorcito" que se extiende a lo largo
del año y al que muchos miran con buenos ojos; esos pantalones cortos y
camisetas veraniegas con los que nos paseamos en el mes de abril para
satisfacción de las terracitas donde quedamos a charlar, etc. son el lado
amable de algo preocupante.
En
20minutos, Clara Pinar nos ofrece un extenso y documentado artículo sobre estas
cosas que traducimos a pequeños gestos perdiendo de vista origen y
consecuencias. El titular de la noticia es "Copernicus augura un verano no
tan cálido tras el tórrido 2023 que provocó en España hasta diez días de
"estrés térmico extremo"*
La idea
de "no tan cálido" se puede entender como menos de esos diez días de
"estrés térmico extremo", que viene a ser la definición técnica de
esos días en que se alcanzan temperaturas que crean situaciones difícilmente
soportables. Pero también que nos espera el calor con algún que otro grado
menos.
El
estrés no es una cuestión solo de lo externo, la temperatura alcanzada, sino de
los efectos que este tiene sobre el cuerpo humano y, menos estudiado, sobre
nuestras relaciones, algo que entra menos en el campo de lo meteorológico y
entra más en la psicología individual y social.
Un
ejemplo. Hace años se modificó nuestro calendario universitario para unificarlo
con Europa. Con la unificación, los alumnos extranjeros podían llegar a España
con sus becas Erasmus y, viceversa, los españoles podían asistir a los cursos
por Europa en los mismos periodos. Como consecuencia, los cursos comienzan a
primeros de septiembre y no a primeros de octubre, como sucedía anteriormente.
Esto significa que las clases comienzan con unas temperaturas que han ido aumentando
en estos años y que ha llevado a inversiones en aclimatar las aulas de las
facultades para hacer "soportables" las altas temperaturas que se
alcanzaban en el interior. Mayor consumo energético, desde luego. Pero también
efectos sobre el comportamiento, la fatiga, la atención, etc.
En el
artículo de 20minutos podemos leer:
El informe de Copernicus sobre
2023 se centra especialmente esta ocasión en los aspectos sanitarios, en cómo
el calor afecta a la salud humana. El elemento clave es el concepto de
"estrés térmico", que mide cómo responde el cuerpo humano al
impacto de las altas temperaturas combinadas con humedad o la velocidad del
viento. Según los científicos que han colaborado con Copernicus, una exposición
prolongada al estrés térmico puede agravar algunas enfermedades y aumentar
el riesgo de sufrir otras. Sus causas son el calor, el agotamiento por
calor o la insolación y afecta especialmente a la población más vulnerable,
como personas mayores y niños.*
Es
indudable que el calor nos afecta de muchas maneras. Están las más claras, las
enfermedades, pero también hay muchas otras formas que no entran en esa
categoría, como es ese "agotamiento" que se menciona.
Entre
los compañeros, es frecuente escuchar este final de curso la sensación de estar
más cansado de lo habitual, una sensación de fatiga. Puede que tenga que ver
con ello estas temperaturas anómalas que nos acompañado durante el curso, con
la batida constante de récords térmicos.
El
calor no solo genera fatiga, sino también ansiedad e irritabilidad. Muchos
hablan de una inusual agresividad en las aulas, algo que se correspondería
también el aumento de la violencia en la sociedad, donde asistimos cada día a
casos de mayor agresividad.
Público 18/07/2022 |
En los últimos años se observa una mayor atención a los efectos psicológicos del aumento de la temperaturas. Los medios le dedican más espacio cuando llegan los periodos de temperaturas más altas. El calor afecta, sin duda. Es una experiencia que tenemos todos.
Los días de calor extremo son claros, pero el aumento de las
medias y especialmente el calor fuera de tiempo y su larga duración producen
fatiga, una sensación que deriva en otras y acaba creando unas respuestas
diferentes. La coincidencia vacacional con los periodos de calor es cada vez
más difícil de lograr por las modificaciones en los hábitos y por las
condiciones laborales. Quizá algunos recuerden aquellos tiempos en los que
"Madrid se quedaba vacío", aquellos agostos de gran calor en donde en
casi todas partes lucían aquellos carteles de "cerrado por
vacaciones". Hoy hay soluciones para combatir el calor, pero no es seguro
que eso no afecte al cuerpo y mente.
Nos
auguran, aunque las previsiones no son definitivas, que no se prevé yanto calor
para este verano. La idea de que "El Niño" dejará paso al fenómeno
meteorológico de "La Niña" es uno de las esperanzas.
Quizá
no tengamos "largos y cálidos veranos", como le gustaban a Tennessee
Williams para sus obras teatrales en las que el calor cocía a sus personajes
sureños, "La Niña" dará paso a fenómenos contrarios, nos dicen. Pero
aunque no batamos récords de temperatura, el calor prolongado, las sequías,
etc. son un reto.
El
argumento de que ese calor nos beneficia por la atracción de turismo se queda
en poco si, como nos dicen, España será uno de las países más afectados por
este cambio climático innegable. El "no tan cálido" verano tras el
"tórrido" verano pasado puede significar muchas cosas. Lo de la
sombra y la cervecita puede no ser suficiente.
Creo que debemos empezar a estudiar los efectos psicológicos del calor, sus consecuencias. Quizá haya que empezar a revisar calendarios y horarios en previsión de esos "estrés térmicos".
* Clara
Pinar "Copernicus augura un verano no tan cálido tras el tórrido 2023 que
provocó en España hasta diez días de "estrés térmico extremo"
20minutos 22/04/2024
https://www.20minutos.es/noticia/5237867/0/copernicus-augura-un-verano-no-tan-calido-tras-torrido-2023-que-espana-registro-hasta-diez-dias-estres-termico-extremo/
Cadena SER Cuenca 22/06/2023 |
Hipertextual |
La Vanguardia 16/08/2023 |
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