Joaquín
Mª Aguirre (UCM)
Parece
que las vacaciones nos sientan mal para esto del coronavirus. Aquel sueño de
que llegaría el verano y el virus se iría de España dejando lugar a los
turistas se perdió por el desagüe de las ilusiones perdidas.
El
ministro Illa, tras un tiempo prudencial, ha citado hoy a todos los consejeros autonómicos
de Sanidad. Y es que las cifras se disparan mientras los técnicos siguen discutiendo
si es la "new wave", un "reboot" o un "remake. Lo llamemos
como lo llamemos, lo real son las cifras. Para acabar de arreglarlo, en Sevilla
se han producido dos brotes de una enfermedad de nombre terrible,
meningoencefalitis vírica, abreviada como del "virus del Nilo", algo
que seguro que llevará a la protesta oficial del gobierno egipcio, siempre tan
celoso del buen nombre del río y de todo lo que navega por él.
No sé
lo que dirá lo que dirá el ministro o qué le dirán los señores consejeros,
cuáles serán sus quejas, lamentos y peticiones. Nuestra diversidad autonómica
hace que a cada uno se le compare con fechas distintas, señalando que algunos
están en "marzo", en "abril" o "mayo" que son
puntos de referencia negativos. Sea lo que sea lo que se planteen, la reunión
es un gesto que puede ser productivo si lleva a políticas comunes y
contraproducente si sirve de nuevo campo de batalla entre administraciones y,
especialmente, partidos.
Para calentar
la reunión, el diario ABC lanza un durísimo editorial contra el gobierno y
contra el Dr. Simón con el titular "Los médicos dicen «basta»":
La famosa «desescalada» ha consistido en lo
que se temía: que el Gobierno de Pedro Sánchez se quitaba de encima la «nueva
normalidad» y endosaba a las comunidades autónomas la lucha contra los más que
previsible rebrotes. Sin embargo, es ahora cuando más necesario resulta aquel
«mando único» que el Gobierno usó con una eficacia tan discutible que hasta las
organizaciones representativas de los médicos españoles se han unido a la
petición de una investigación independiente sobre la gestión de la pandemia.
Los médicos españoles no han dudado en lanzar una acusación y varias
advertencias. Acusan al Gobierno y a las autoridades públicas competentes de no
estar adoptando medidas eficaces contra los rebrotes de contagios por Covid-19.
Y advierten de que la situación puede degenerar en una repetición de los peores
episodios vividos entre marzo y mayo pasados. El documento de los médicos
destruye la presunción de inocencia del Ejecutivo desde el momento en que
denuncian «los claros fallos constantes en la gestión de las estadísticas
diarias, con cifras insuficientes y contradictorias que han llevado a una
percepción generalizada de descoordinación en la gestión de la pandemia». Esta
era la responsabilidad de Fernando Simón y su equipo de expertos: controlar la
evolución de la pandemia y dar una imagen fiel de sus consecuencias. No han
conseguido lo primero ni lo segundo, y la denuncia de los médicos es tan clara
e irrebatible que la única salida digna para todos los responsables señalados
es la dimisión.*
El
documento al que se alude es el publicado en The Lancet reclamando una evaluación independiente de la gestión
realizada. Lo sorprendente es cómo el diario convierte en incendiario lo que es
un manifiesto sensato, que trata de alejarse de cualquier planteamiento
político y que señala que no se trata de buscar "culpables" sino de
encontrar "soluciones".
Más
chocante resulta la entrevista que se incluye con Serafín Romero, Presidente de
la Organización Médica Colegial, al que el titular del periódico convierte en
un iracundo jacobino pidiendo la guillotina para el doctor Simón. El titular
señala: "Serafín Romero: «Necesitamos ya un comité de expertos
independiente y Simón no debe liderarlo»" con la rotundidad de la
denuncia, mientras que en la entrevista podemos leer:
¿Debería entonces
dar Simón un paso atrás?
El doctor Simón, del que nadie duda de su
dedicación y esfuerzo, creo que no debería ser quien coordinara ese nuevo
comité de expertos. Ahí está la hemeroteca para recordar las controversias. Si
se nombra un nuevo comité debería ser este grupo quien decidiera el nuevo
liderazgo. Nadie duda de la capacidad de Fernando Simón pero es necesario un
golpe de timón en este nuevo escenario.**
Si algo
se desprende de la entrevista y los manifiestos médicos es precisamente evitar
la politización que, en cambio, el ABC reclama desde su editorial y titulares.
Entendemos que el diario tenga su agenda antigubernamental, lo que es lícito,
lo que no lo es tanto es convertir a los médicos en asaltantes de La Bastilla,
algo que no es su intención en absoluto a la vista de los propios textos.
En
contraste con el editorial titulado, "Los médicos dicen «basta»", entre las primeras preguntas que se la hacen al doctor Serafín Romero
está la siguiente:
¿El mundo
sanitario se rebela?
No, no exactamente, pero sí queríamos contar
cómo nos sentimos. El nuestro es un sentimiento de indignación e indefensión.
Pensábamos que tras el primer golpe de la pandemia íbamos a contar con más
recursos y vivir otros escenarios, pero no se está cumpliendo. La epidemia se
está desbordando y aunque estamos más cubiertos porque tenemos material,
podemos volver a vivir la misma sobrecarga que en marzo hizo tambalear nuestra
atención sanitaria.**
Allí
donde hay sensatez, existe el empeño de politizar. Es la cabeza del gobierno
donde se apunta y no al coronavirus, lo que no parece de recibo. De hecho, lo
último que necesitamos ahora es más divisiones. Es precisamente unidad lo que
la gente pide ante una emergencia.
Es
cierto que ha sido un error político colosal el hacer creer que había un comité
de expertos distinto al ministerio. Pero eso no quiere decir que debamos seguir
acumulando errores políticos en cadena en estos momentos. Es necesaria la mayor
coordinación entre administraciones en algo que tanto texto de The Lancet como
las declaraciones en la entrevista hacen: no se puede funcionar bien con tal
cantidad de administraciones autonómicas cada con un gobierno distinto, con
mayoría y con coaliciones diferentes, unas tirando para un lado y otras para
otro.
¿Quién está al
mando de la epidemia?
Ahora vuelve a estar dividido en 17 sistemas
sanitarios diferentes. No existe ese liderazgo que debería estar compartido
entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades con un mensaje común. Necesitamos
un mensaje único, con unas cifras de la epidemia comprensibles para todos y con
medidas homogéneas. Esto es algo serio, no podemos permitirnos que unas
comunidades lo hagan mejor que otras, los virus no entienden de fronteras administrativas.
Ahora no sabemos cuál es el rumbo ni la línea con la que debemos trabajar.**
Creo
que queda claro que el error ha sido las disparidades de criterio en cuanto que
se ha perdido la coordinación. Recordemos que fue precisamente la reclamación
de los gobiernos autonómicos —recordemos al catalán, con su "¡España nos
mata!"— la que daba por descontado que una vez hecha la labor dura del confinamiento, con el desgaste
político correspondiente tras cada pleno de renovación del estado de alarma,
todo iba a ser un camino de rosas. Sin embargo, nadie se esperaba que el
retroceso pudiera ser de tal calibre, especialmente porque se trataba ya de
satisfacer a las patronales inquietas para "abrir la economía", pero
lo que se ha hecho realmente ha sido abrir las puertas al virus. ¿Responsables?
Que cada uno haga examen de conciencia y vea su grado de cumplimiento o de
relajación, cuando no de desprecio descarado de las medidas.
Hace poco
más dos semanas, todas las autonomías de autodeclaraban lugar seguro y pedían la llegada del turismo, la creación de
"corredores" que permitieran el maná turístico, la reapertura de los
locales día y noche, la vuelta del fútbol, los toros y las fiestas patronales.
Se han celebrado las "no fiestas" con obvio descaro y peligro. La
Policía se ha tenido que personar en las playas para desmontar los continuos
botellones, vigilar las casas para que no salieran los confinados o se rasgaban
las vestiduras porque los confinados no podían ir a votar en las elecciones
autonómicas. Sí, hay mucho sobre lo que reflexionar sobre nuestro
comportamiento.
Esta
guerra la deben dar los médicos, como la están dando ya. Pero si la convertimos
en lucha política lo que ocurrirá, previsiblemente, es que se perderá eficacia, credibilidad y la necesaria unidad de las voces. ¿Críticas? Por supuesto, las que hagan
falta, pero siempre para mejorar la situación y no para erosionar la confianza,
algo que tiene unos efectos directos y negativos sobre la opinión pública,
donde parece que muchos están mirando con lupa las grietas por las que saltarse
las medidas para salir. Aquí no debería haber más que dos colores, el de los responsables y el de los irresponsables.
Es hora
de responsabilidad, de lo más alto hasta ras de suelo. Difícilmente se puede
reclamar sensatez si creamos un ambiente de conflictos generalizados. En la
lectura de lo que los médicos dicen está claro que piden unidad y claridad,
debate entre la comunidad científica, alejándose de cualquier otra
consideración. Piden mejorar las condiciones de su trabajo, algo indispensable.
Para ellos y para todos. Poner otras palabras o intenciones en su boca no es responsable ni serio.
Reclamar
las condiciones adecuadas y el cumplimiento de las solicitudes es, por
supuesto, dar un paso político. Pero
no se debe confundir "político" con "partidista", algo
diferente y cuya confusión nos trae muchos dolores de cabeza, como país y como
ciudadanos.
Se
debería aprender de la actitud de los médicos y no usarlos para otro tipo de
guerras para las que quizá no sea el momento y, sobre todo, en las que nadie
puede arrojar la primera piedra de la inocencia. Los médicos deben ser escuchados, pero no manipulados.
Lo que
los ciudadanos opinen sobre la eficacia de unos y otros tendrán tiempo de
hacerlo y pasarán factura. Hoy necesitamos estabilidad y unidad. Nadie debería
aprovechar esta situación trágica excepcional para sacar provecho o renta.
* Editorial "Los médicos dicen «basta»" ABC 13/08/2020 https://www.abc.es/opinion/abci-medicos-dicen-basta-202008132344_noticia.html
** "Serafín Romero: «Necesitamos ya un comité de expertos independiente y
Simón no debe liderarlo»" ABC 14/08/2020
https://www.abc.es/sociedad/abci-serafin-romero-necesitamos-comite-expertos-independiente-y-simon-no-debe-liderarlo-202008140102_noticia.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.