Joaquín
Mª Aguirre (UCM)
Ayer
mismo, dentro de los Cursos de la Escuela de Verano Complutense, me habían pedido
que interviniera en un curso sobre "Emprendizaje y Comunicación"
sobre la situación de dos grupos, "mujeres" y "jóvenes", en
Egipto tras el proceso de la Primavera Árabe. Ambos grupos, desengañados de la
política oficial practicada, han emprendido
sus propios caminos de desarrollo para alcanzar sus metas de realización y de
intento de transformar la sociedad en sus propios ámbitos.
Los
estudiantes del curso, en su totalidad latinoamericanos, se interesaron por el
estado de Egipto y la zona. Egipto —pese a lo que los egipcios opinen— es un
enorme desconocido fuera de sus fronteras, por lo que su compleja situación e
historia reciente apenas llega más allá de hechos desconectados.
Uno de
los aspectos que me interesaba destacar en la segunda parte de mi intervención
son los logros que los dos grupos han realizado con su propio esfuerzo en el
terreno del emprendimiento, la puesta en marcha de proyectos solidarios en los
que, en una parte de una sociedad terriblemente desigual, indiferente en muchos
casos a la pobreza y al abandono, trata de ayudar a solventar la desidia institucional
y aliviar el sufrimiento de los grupos más vulnerables. Todo esto había que
entenderlo, les propuse, en el marco de una sociedad en la que el sistema
patriarcal supone la vertebración esencial.
Quizá
se usa en demasía la idea de "patriarcado" sin profundizar en lo que
realmente supone. Los grupos de mujeres y jóvenes son una contestación
precisamente a la idea patriarcal de que los jóvenes y las mujeres, por serlo, están sometidos a la autoridad de padre y marido. La diferencia entre los dos grupos es que de la
"juventud" se sale, por lo que se podrá ocupar el puesto del
patriarca llegado el momento, mientras que la mujer no tiene límite de edad y
su dependencia es de por vida, primero del padre y después del marido y hasta
del hijo.
Es
conocido el discurso final de Hosni Mubarak en el que les decía a los egipcios
que les hablaría como un padre habla a
sus hijos e hijas. Fue un terrible error de percepción, pues eso era lo que
muchos egipcios no querían escuchar de nuevo. Pero emergía oficialmente la
figura del patriarca, de la misma manera que muchos egipcios le defendieron
después de su caída señalando que era un "hombre mayor" al que "se
le debía respeto".
El
patriarcado es lo contrario de la democracia, que es un sistema igualitario.
Todas las sociedades han surgido de los patriarcados y algunas han logrado
deshacerse de ellos en su camino hacia la igualdad. La igualdad es un principio
avanzado culturalmente; no se basa en ninguna evidencia natural, sino en el deseo
de ser iguales. Los partidarios del patriarcado, por su parte, dicen mantener
un sistema basado en una ley divina, según la cual, el hombre manda sobre la
mujer y el padre sobre los hijos. Ese mandato debe ser respetado para evitar el
desorden y el conflicto. Las hijas son consideradas formas de enlace con otras
familias para mejorar la posición social del conjunto familiar.
Todas
estas cuestiones se pusieron sobre la mesa en el curso y traté de mostrar los
deseos de muchos egipcios y egipcias de que esto cambiara en una sociedad que
había ido retrocediendo desde los años ochenta fruto de una "reislamización
desde abajo" gracias a las corrientes —económicas y humanas— que llegaban
de los países del Golfo, entre otros factores como la revolución iraní y la
guerra de Afganistán.
2012 |
El tradicionalismo
patriarcal se ha ido reforzando conforme las mujeres reivindicaban sus
derechos. Egipto, escenario de los primeros avances del feminismo en el mundo
árabe, con nombres y momentos históricos en su reivindicación de los derechos
de las mujeres, se ve atacado por el tradicionalismo que controla los posibles
logros de las mujeres. Por su parte, muchas de ellas se centran en buscar sus
propios caminos, en extender la idea de derechos, ampliar la cultura, etc. a
las que se encuentran en las peores condiciones. En este sentido, hay multitud
de iniciativas loables, incansables en sus esfuerzos por mejorar la situación
de las mujeres en una sociedad que es agresiva para las mujeres pero a la que
se le llena la boca de declaraciones proteccionistas sobre la santidad de las
mujeres. Ya en 2011, se publicaron artículos avisando de los peligros de los
que decían tener a las mujeres en los más altos pedestales, que resultan ser
prisiones patriarcales en la que se las encierra con la excusa protectora. Los
hechos confirmaron esto.
El
discurso oficial sigue diciendo que el golpe militar de 2013 fue una rectificación de los desvíos causados por la revolución de
2011, la del 25 de enero, la inserta en la Primavera Árabe. Pero el golpe de
estado de El-Sisi no ha sido una cultura de la democracia, del igualitarismo
democrático que se reclamaba, sino la reinstauración de un patriarca cuya
aparición se considera providencial
(con sueños proféticos incluidos) para evitar el caos que trajeron los revolucionarios. La alternativa no es más que el orden, representado por el estamento
militar (la institución ordenada por
excelencia, una de las tres máquinas
humanas descritas por Mumford Lewis).
El-Sisi
es una figura patriarcal prototípica, un padre que vela por sus hijos, pero al
que muchos jóvenes y mujeres han dado la espalda por representar solo una
versión modernizada del mismo principio autoritario que gobierna Egipto a
través de los siglos. Los resultados electorales mostraban que los jóvenes se
habían abstenido masivamente mostrando la falta de sintonía con el poder y sus
maneras.
Las
mujeres vuelven a ser de nuevo el sector más vulnerable. Las cifras de acoso
sexual en Egipto son monstruosas y está considerado según los indicadores
establecidos como uno de los países más agresivos con las mujeres. Mi sorpresa
llegó ayer al ver la noticia que Ahram Online traía con el titular "Egyptian
newspaper apologises for sexual harassment cartoon after social media backlash".
Las noticias sobre el acoso sexual al término del Ramadán son ya tradicionales.
La salida a la calle da lugar a nuevos acosos masivos:
Egyptian daily Al-Masry Al-Youm apologised on
Sunday following a backlash on social media for a cartoon it had published on
sexual harassment.
The cartoon shows a man proposing to a woman
while asking her father to be thankful for the offer after “half of the young
men in the neighbourhood sexually harassed her during Eid.”
The cartoon was slammed by activists online for
what they said was the punishing of victims of sexual harassment.
In its apology, Al-Masry Al-Youm affirmed its
"commitment to condemning this crime and fighting it by all means
possible," adding that it rejects "stigmatising the victim."
Although a chronic problem in Egypt, sexual
harassment and assault is more frequently reported during holiday seasons, when
large crowds take to the streets. It typically surges during the three-day Eid
holiday that marks the end of Ramadan.
“The cartoon attacks one of the most important
achievements we have accomplished over the past years, which is that women can
speak up without being afraid or ashamed,” wrote Dalia Abdel-Hameed, gender and
women’s rights officer at the Egyptian Initiative for Personal Rights.*
La
caricatura revela en su crudeza una realidad que es la del pensamiento en
términos patriarcales del papel del hombre, la mujer, la familia y el sistema
económico subyacente. La mujer acosada pierde valor y los aspirantes a ella rebajan
su ofrecimiento. Una mujer que ha sido tocada no vale lo mismo que la que no lo
ha sido, que es lo que le viene a decir el pretendiente al padre: da gracias
porque hago esta oferta después de que tu hija haya sufrido acoso por la mitad
del vecindario. El hecho de que el diálogo tenga lugar entre hombre es también
un indicador de que el matrimonio es un pacto entre grupos familiares que
buscan la mejor posición en un sistema en el que el emparentar abre nuevas posibilidades
sociales.
En
entrevista que el poeta sirio Adonis mantiene con su traductora al francés, la
profesora Houria Abdelouahed, publicada con el título "Violencia e
Islam" (Ariel, 2016), se aborda la cuestión del honor femenino y familiar:
H: [...] incluso hoy en día, una mujer que es
violada le dice al hombre:«hatakulak 'ardak» (ellos han violado tu honor). No es de su cuerpo y
de su psique de lo que se trata, sino del honor ('ard) del hombre.
V: 'Ard es visto como signo de lo masculino.
Al'Ard es la forma femenina de lo
masculino sexualmente hablando. No se dice hataka
'ardaba (él ha violado el honor de ella), pues ella no existe en sí misma.
No tiene ni pensamiento ni personalidad ni sentimiento ni cuerpo que le
pertenezcan. Ella está y permanece vinculada a él- Por consiguiente, el
problema sigue siendo el del hombre: el que ha sido humillado es él y no ella.
(94)**
La
caricatura del diario revela esa realidad social de la mujer devaluada por el acoso, cuya pérdida de valor afecta a la
familia como grupo del patriarca, que es el poseedor y responsable del capital
virtuoso de la familia. Ese es el marco patriarcal.
Contra
ese marco luchan muchas mujeres egipcias a través de la reivindicación de su
individualidad, de su valor como personas, y de su independencia. No lo tienen
fácil. Los ataques contra el "feminismo" consideran este como otro
"invento" occidental destinado a socavar un orden natural, instaurado
por Dios, que establecen obediencia y dependencia como los dos aspectos que
generan la figura del patriarca. El hombre es necesario para evitar el caos en
el mundo; es necesario que aplique las leyes divinas que son las que introducen
el orden. Allí donde aparece el caos, el hombre aplica las leyes. La primera de
todas es evitar que la mujer siembre el desorden. Lo de Eva no se debe repetir.
En otra
noticia Ahram Online nos hablaba
estos días de otro caso durante el Eid con final sangriento:
An 18-year-old man was killed Friday after a
fight with the brother of a girl he allegedly sexually harassed in the Upper
Egyptian governorate of Beni Suef, Al-Ahram Arabic news website reported.
Beni Suef Security Director Mahmoud El-Eshiery
received a notice from the governorate’s general hospital that it had received
the body of a young man that was stabbed in the abdomen on the third day of Eid
al-Fitr.
The hospital also received the young man’s
brother, 23, who was involved in the fight and is in critical condition.
According to initial investigations, a quarrel
broke out following the verbal harassment of the girl, which then led to a
dispute between the involved parties.
Investigations revealed that the girl's
brother, 26, assaulted the two brothers with a bladed weapon.**
La noticia tiene dos comentarios de los lectores:
1) "i hope the girls in Egypt should
change there way of dressing if u are muslim pls be a muslim dress properly / and
I hope they have not do anything to the one that have killed that harasser I
hope the man who stabbed the brothers is not charged with any crime"
2) "Good / I hope the man who stabbed the
brothers is not charged with any crime. The scum that commit these crimes
deserve everything they get"
El primero de ellos responsabiliza a las mujeres (por su
vestimenta) del incidente. Los hombres viven en fraternal tranquilidad hasta
que las mujeres la quiebran con sus devaneos y desatinos. Los dos coinciden en que
el hermano ha actuado correctamente al apuñalar a los hermanos que acosaban a
su hermana y que no debe ser acusado de nada.
La noticia y los comentarios —al igual que el chiste
criticado— revelan el fondo patriarcal. La mujer debe ser vigilada, controlada
para evitar que se produzca el caos social. El vestido, el encierro, las
limitaciones del trabajo, la segregación constante, etc. tienen como
finalidad preservar el orden, evitar el desastre. Este es el discurso oficial.
La realidad es, desde luego, otra.
* "Egyptian newspaper apologises for sexual harassment
cartoon after social media backlash" Ahram Online 11/07/2016
http://english.ahram.org.eg/NewsContent/1/64/232942/Egypt/Politics-/Egyptian-newspaper-apologises-for-sexual-harassmen.aspx
**
"Egyptian teen stabbed to death for sexual harassment during Eid"
Ahram Online 08/07/2016
http://english.ahram.org.eg/NewsContent/1/0/232743/Egypt/0/Egyptian-teen-stabbed-to-death-for-sexual-harassme.aspx
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