martes, 8 de agosto de 2017

¡Adiós, Nicole!

Joaquín Mª Aguirre (UCM)
Habrá que inventar un término a este estado nuevo que no se parece a la confrontación bélica, ni a la guerra fría; que es espionaje, pero de otra manera; que usa más las noticias falsas que la propaganda, etc. Hay que encontrar rápido un término que refleje lo mejor posible este estado concentrado de los viejos recursos del despiste y los nuevos llegados con las tecnologías digitales y las redes.
La vieja imagen del espía infiltrado con su cámara "minox" sacando fotografías de la carpeta extraída de un archivador, que pusieron de moda los relatos de espionaje, ha quedado en el limbo romántico de las pantallas en blanco y negro. Hoy es más sencillo transmutarse en virus informático, en troyano de bits y deslizarse surfeando por las redes, el universo virtual más real que el real.
Hemos descubierto con horror que las apariencias era la único sólido que teníamos, que aquello que tan pomposamente llamábamos "documentos" se fabrican ya expresamente para ser robados y engañar al enemigo, que nos los roba de la "nube" o "nubarrón", del disco súper encriptado que nos vendieron como el más seguro del mundo. Nada es ya lo que parece.
Acaban de detener al hacker que nos salvó del último apocalipsis informático. Ha pasado de ser el héroe salvador al villano que lo fabricó. Ya todo viene ya en un pack, villanos y salvadores.
Las noticias nos hablan continuamente de hackers de distintos lugares que apuntan con sus ratones hacia las administraciones de distintos países. Los hay coreanos, rusos, chinos, iraníes, israelíes etc. No eres nadie sin un ejército de hackers detrás. Los hay pro rusos, pro chinos, por palestinos, pro Israel, pro Venezuela... Antes se distinguía entre "hackers" y "crackers". De los primeros se decía que eran "probadores externos" de la seguridad, que se colaban para demostrar los agujeros del sistema; de los segundo, que su voluntad era destruir los sistemas. Pero estén surgiendo nuevas modalidades.
Hemos descubierto que es muchos más barato y destructivo, menos sangriento también, esto de luchar en el ciberespacio. Lo que antes iba a ser nuestra redención del perverso mundo material, donde íbamos a poder resolver las desigualdades (económicas, físicas, de género...) al desmaterializarnos, pasar "del átomo al bit", como decía Nicholas Negroponte, el gurú del MIT en los noventa, se ha convertido en una nueva pesadilla más.

La última jaimitada virtual (hace un rato) nos la trae The Washington Post:

Early Saturday morning, President Trump tweeted his gratitude to a social-media super-fan, ­Nicole Mincey, magnifying her praise of him to his 35 million followers.
Here’s the problem: There is no evidence the Twitter feed belongs to someone named Nicole Mincey. And the account, according to experts, bears a lot of signs of a Russia-backed disinformation campaign.
On Sunday, Twitter suspended the Mincey account, known as @ProTrump45, after several other users revealed that it was probably a fake, created to amplify pro-Trump content.
The incident highlights Trump’s penchant for off-the-cuff tweeting — and the potential consequences for doing so now that he holds the nation’s highest office. Even as the president has railed against multiple investigations into Russia’s meddling in U.S. politics, he may have become Exhibit A of the foreign government’s influence by elevating a suspected Russia-connected ­social-media user — part a sophisticated campaign to exacerbate disputes in U.S. politics and gain the attention of the most powerful tweeter in the world.*


En resumen: Después de que Trump felicitara a su súper fan, es posible que esta no sea más que un nombre falso, una personalidad creada para arrastrar a otros en los mensajes alabando al presidente. La creación de personalidades falsas es bastante habitual, pero que estas trabajen para Trump menos. Los indicios apuntan a los hackers rusos, cuya estrategia sigue siendo mantener la imagen de Trump en pie.
La personalidad creada para Nicole Mincey tenía que ser convincente. A los espías también se les fabricaba una personalidad, Existe una Nicole Mincy, pero dice no ser la súper fan de Trump. Una simple letra le puede dar verosimilitud al nombre. Luego el rostro: una joven conservadora de color, cuya apariencia le ha sido robada a una modelo.
La publicación "Heavy" se había lanzado a investigar lo que hay tras "Nicole Mencey" en un artículo titulado "Nicole Mincey: 5 Fast Facts You Need to Know". Allí describen la identidad creada:

She is, indeed, a college student, scheduled to graduate in 2018. Her life closely tracks the biographical details put out about the Nicole Mincey persona. One reader sent Heavy a screenshot showing that Nicole Mincey’s page wrote in a post that it was her birthday on the day of the New Jersey college student’s birthday, although Heavy could not independently verify that because the account has now been suspended. Heavy did find posts in which people tweeted at both what was positioned as the real student’s Twitter page and the ProTrump45 page in the same tweet as far back as April.
[...]
It’s a very convoluted story because the person using the “Nicole Mincey” name went so far as to give radio and online interviews, and established detailed biographies online, before the Trump retweet (in other words, a back story and actual contact with radio hosts), and the website where the modeling photo originally came from now says it’s identified 10 accounts created by one person it didn’t name using multiple names and identities and reported them to Twitter for suspension. All of this was designed to distribute pro-Trump commentary that positioned him as having a diverse array of supporters and to apparently sell hats and shirts on the ProTrump45 website.
A person using the name “Nicole Mincey” and claiming to be the “ProTrump45” Trump merchandise entrepreneur was touted as appearing on a New York radio show in June and previously gave an interview to a conservative website. Heavy has also unearthed audio of a person using the name “Nicole Mincey” of ProTrump45 speaking on a Trending Today USA radio show in May. You can listen to the audio below. She appears at the beginning of the program and discusses why she supports Trump. Even odder, Nicole Mincy, the real college student, told Daily Beast that another person assumed the identity Nicole Mincey for that show.**


La emprendedora que no existía pero probablemente se beneficiara (ella u otros) de las ventas de prendas promocionales de Trump. Queda la duda de si se trataba de una tapadera, un negocio o de ambas cosas. Sus apariciones radiofónicas son también intrigantes y forman parte de esa creación multimedia con la que se vencen las resistencias. Hay que ver, oír... para creer.
El tuit del presidente iba a ser el colofón a esta labor minuciosa de construcción del personaje de Nicole Mincey. Pero han fallado en sus cálculos, el hiperrealismo virtual puede llevar demasiado lejos. Nicole nació para apoyar a Trump y ha sido el tuit de Trump el que ha levantado la liebre. Nos cuenta la publicación: “Nicole Mincey” originally shared a meme that read “Trump fights for us” and wrote, “Trump working hard for the American people…..thanksUS.” Trump, pausing from his working vacation in New Jersey, took time to thank “Nicole.”** Y se lio el asunto.


¿Ha terminado el asunto? ¡No! Cuando todo parecía indicar que Nicole era un bot ruso, The Daily Beast ha logrado "llegar" hasta ella y descubrir al grupo tras el negocio del apoyo a Trump. Con un orgulloso titular ("I Found Trump Fan Nicole Mincey and She’s Not a Twitter Bot"), lo que queda más o menos claro es que la chica que decía no saber nada, sí sabía; que hay más gente a la que dice no conocer en persona dirigiendo la atención hacia la compra de objetos relacionados con Trump. Las huellas han sido borradas para que no queden rastros de quién estaba detrás (o delante). Me quedo con la última frase, la que cierra el tira y afloja que es todo el diálogo con la falsa Nicole para que cuente su verdadera historia y lo que hay detrás. «“It’s hard with Trump. A lot of people don’t like him, unfortunately,” she said.»***


Sabemos que Nicole no es un bot ruso, lo que ya es algo. Sabemos que existe pero que no quiere que se sepa quién es; que se parece mucho a lo que contaba su perfil porque puede que otros la utilizaran para presentar una biografía plausible. No era la única, la fotos de los otros miembros del grupo también son sospechosas de ser recogidas de la red. Todos se han disuelto en la nada. La red se los ha tragado y saldrán por algún otro lugar con nuevas personalidades.
Ahora, la cuenta de Twitter de Nicole ha sido desactivada. La América de Trump sigue produciendo sus dosis de locura diarias. The Washington Post lo llamó "curioso caso". Si esta historia le parece absurda es porque lo es. Tuit-tuit.


* "The curious case of ‘Nicole Mincey,’ the Trump fan who may actually be a Russian bot" The Washington Post 7/08/2017 https://www.washingtonpost.com/politics/the-curious-case-of-nicole-mincey-the-trump-fan-who-may-actually-be-a-russian-bot/2017/08/07/7aa67410-7b96-11e7-9026-4a0a64977c92_story.html

** "Nicole Mincey: 5 Fast Facts You Need to Know" Heavy 5/08/2017 http://heavy.com/news/2017/08/nicole-mincey-trump-store-new-jersey-who-is-gear-twitter-bio/
*** "I Found Trump Fan Nicole Mincey and She’s Not a Twitter Bot" The aily Beast 8/8/2017 http://www.thedailybeast.com/i-found-trump-fan-nicole-mincey-and-shes-not-a-bot





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