lunes, 25 de abril de 2016

Líneas rojas y conformismo

Joaquín Mª Aguirre (UCM)
Hoy se esperan nuevas movilizaciones en Egipto tras las celebradas hace unos días. Entre unas y otras, decenas de detenciones con la finalidad de retener a las personas o simplemente crear un clima de intimidación social que evite que la gente se manifieste. Cuando parecía que las causas para la protesta se diluían en lo cotidiano, el gobierno de El-Sisi les ha puesto en bandeja una: la entrega a Arabia Saudí de dos islas, Tiran y Sanafir, por las que los egipcios han recobrado un inusitado interés. Hoy vuelven a ser llamados a la calle, con las advertencias del ministro del Interior de que no traspasen las "líneas rojas", según recoge la prensa.
Egypt Independent trata de explicar la cuestión de las "líneas":

Interior Minister Magdy abdel Ghaffar has warned against any attempts to destabilize the nation through protests or violent attacks, saying anyone involved in such activities will have crossed a "red line" and be dealt with strictly by security forces.
Gaffar made the comments during a meeting with deputies and security officials ahead of Sinai Liberation Day on Monday, after some activists called for mass protests against the recent transfer of two Red Sea islands from Egyptian to Saudi control.*


No están muy claras las "líneas" porque se entiende ya que cualquier protesta tiene por finalidad desestabilizar el país y no el contenido de la protesta en sí, que le debe parecer irrelevante. Dado que el presidente ha pedido expresamente que nadie hable de las "islas", algo realmente insólito en la forma de gobernar, se debe considerar especialmente grave el simple comentario. De hecho, algunos escándalos se han producido por el cambio de rumbo de algunos políticos y comentaristas que se lanzaron a la crítica de la decisión y después tuvieron que recoger las velas ante el temor de ser considerados entre los detractores del régimen, riesgo que no quieren correr.
Las palabras del ministro van más allá. Los que protestan pierden el derecho a ser llamados egipcios y pasan a ser considerados como "enemigos del Estado". Podrían ser nombrados como "enemigos de las malas decisiones gubernamentales" o "enemigos de los errores",  pero es más eficaz para los intereses del gobierno hacerlo de esa manera. Se trata entonces de atemorizar al país entero con las consecuencias de lo que pueda ocurrir, dividir al pueblo haciendo que consideren "enemigos" a los que se manifiestan discordantes y acusándolos de estar al servicio de potencias extranjeras por protestar porque dos islas se hayan entregado sin más a Arabia Saudí, la potencia extrajera que financia Egipto. Señala el diario:

At the meeting, the minister warned of possible attacks on key establishments, including police facilities, and said that security personnel must be prepared for difficult situations. He said policemen bear the responsibility of preserving safety and stability.
He also highlighted the right of citizens to live in stable country and said that the law will be applied to everyone equally.
“I trust in the awareness of the honorable citizens, that they will not respond to calls to create chaos and harm security, or even respond to attempts to create division between security forces and the people, whom we have vowed to protect and secure, whatever the sacrifices or challenges may be,” he said.
He warned against seeking to change government policy by unconstitutional means, saying that the intentions of the constitution have been put into effect by means of parliamentary elections, with government performance subject to various constitutional mechanisms for review.
There have been reports of raids by security forces on cafes and apartments in recent weeks, with several people, including journalists, detained on suspicion of planning protests.
Among them are 14 activists arrested by the East Cairo Prosectuion on charges of inciting demonstrations and seeking to overthrown the government by means of force.*

Es sorprendente que esta retórica les siga funcionando. Por un lado, los "honestos ciudadanos", por el otro las "fuerzas del mal", como las ha llamado el presidente, quien no necesita elegir metáforas.


Muchos egipcios han borrado de sus mentes la brutalidad policial, la barbarie con la que han sido reprimidos desde enero de 2011, por poner el marcador a cero respecto a la brutalidad policial que llevó a la gente a las calles para la caída del régimen de Hosni Mubarak.
Gracias a esta información, nos enteramos de la existencia de un "frente" contra las manifestaciones en Egipto, algo de lo que no teníamos constancia hasta el momento:

Judge Samah Sameer, a member of the Defence Against Protests Front, said the general prosecutor called for the detention of the 14 activists and the observation of 33 others on the same charges.
The full list of charges includes: intent to change the constitution and its national agenda; intent to attack police stations and carry out terrorist activities; using violence and intimidation to force the president into refraining from carrying out his rightful role and duties, as stated in the constitution; assembling a terrorist group to paralyze the law and prevent the powers that be from practicing the law; attempting to harm national peace by means of violent force; carrying out a criminal project promoted through use of an international terrorist network; intent to influence the authorities by force; and harming the public interest.*

Cuando el presidente presumía hace unos días de la "independencia judicial" en Egipto se debía referir a casos como el de este juez, Samah Sameer, cuya imaginación jurídica desborda cualquier tiempo de previsión. Toda esa lista de acusaciones por ¡estar sentado en un café!
La creación de "The Defence Against Protests Front" viene a ser como la réplica estatal de "The Front to Defend Egyptian Protesters (FDEP)", creado en 2010 cuando comenzaron las protestas en Egipto y que desembocarían en las manifestaciones masivas en la Plaza de Tahrir y otros lugares del país en la Primavera Árabe. Es como el yin y el yang. Allí donde se creó un "frente" para defender a los que protestaban contra el estado represivo, corrupto y autocrático de Mubarak, se crea ahora otro "frente" para defender a un estado que no ha cambiado prácticamente nada respecto al otro. Este nuevo se crea para "defenderse" de los que protestan. La "protesta" y el "protestante" son ahora el nuevo enemigo del pueblo.


Pero toda esta retórica absurda es la forma de justificar un estado de terror entre todos aquellos que discrepan de las políticas del gobierno, cuyos errores son continuos y sus fracasos estrepitosos. Nada de lo previsto le sale a El-Sisi, en gran medida por sus propias decisiones. Lo que queda entonces es la palabrería, esgrimir los peligros continuamente para que todos vivan entre el miedo y la tensión provocada por el propio gobierno.
Les ha dicho el presidente a los egipcios ayer:

“Together we will protect the State from attempts to undermine it. They will not succeed, and we will not allow anyone to take Egypt, our safety and our institutions from us,” Sisi said.**


Todo esto —insisto— porque han hecho, sin notificación previa alguna, la entrega de dos islas a Arabia Saudí. Los que han protestado, además, han tratado por todos los medios de mantener alejados a los Hermanos Musulmanes —que también se han vuelto nacionalistas— que querían subirse al carro de las protestas. Saben que la presencia de un islamista, de un simple gesto, canto o pancarta vinculada con la Hermandad, desencadenará una reacción imprevisible en sus consecuencias. La Historia así lo atestigua, tendrá el beneplácito de una parte importante de la población y justificará las medidas tomadas.
No hay término medio. Si protestas, eres un enemigo de ese estado egipcio —definido unilateralmente por su presidente y por el ministro del interior— y como tal serás tratado. La información anterior de Egypt Independent incluye los ministerios que se encuentran en alerta —Sanidad...— ante la previsión del caos que hoy se puede producir en el país. Todo forma parte de esa lucha psicológica, la 4GW, que el propio presidente dice que se aplica contra los egipcios y en la que se incluye a todo aquel que dice lo contrario que el gobierno.


En el blog del Middle East Centre, de la London School of Economics and Political Science, Yasmine Laveille, una investigadora doctoral en el centro, publicó a mediados de marzo un texto titulado "Is there any hope left for Egypt’s revolutionaries?" y cuyo comienzo era este y que sumaba más preguntas a la inicial:

Already in early 2014, when I first started my fieldwork in Upper Egypt, ihbat, meaning disappointment, frustration or defeat, was felt by most young supporters of the 25 January 2011 uprising. Six months after the army’s ouster of President Morsi, it was obvious that counterrevolutionaries had taken advantage of popular discontent towards the Muslim Brotherhood to seize control of the state. Determined to retain power, they had then started a witch-hunt, eliminating all opponents potentially threatening their rule. After jailing and killing thousands of Muslim Brotherhood supporters, they started to attack other more secular revolutionary leaders and activists, while deploying considerable efforts in presenting the 25 January revolution as a foreign conspiracy. Two years later, with many renowned activists remaining in detention while others were killed, the revolutionary youth that hoped for a better Egypt able to offer the same chances to everyone, is more depressed than ever. However, with the first signs of the coming end of the current era, could we catch a glimpse of light at the end of the tunnel?****


La investigadora señala el deterioro del régimen y las crecientes críticas respondidas por una mayor represión. Recomienda no abandonar el empeño reformista y, en lugar del asalto al poder desde fuera, intentar hacerlo desde dentro, desde las instituciones, integrarse en los poderes locales. Me parece ingenuo ante un poder absoluto que no va a dejar flecos, como está demostrando cada día. La frustración se mantiene.
Poco más de un mes después, algunos egipcios han encontrado un motivo para salir a la calle a protestar. Sin embargo, ¿ha cambiado en algo la situación? Me temo que no. Nada cambiará si las protestas no se dirigen hacia donde deben. Por mucho nacionalismo que se eche en la cuestión de las islas, muchos egipcios se preguntarán qué sentido tiene hacerlo frente a las demás calamidades que les afectan. Sabe que ese no es el problema, sino la excusa.
Los errores siguen siendo los mismos y las esperanzas de que prenda una chispa que cambie el régimen son ilusorias en el escenario actual. El régimen no cambia porque se sostiene no solo en el poder militar, sino que tiene un firme apoyo en la mentalidad egipcia. No me refiero en un apoyo carismático hacia una persona, El-Sisi, sino a una voluntad acomodaticia de dependencia. La palabra más adecuada creo que sería "conformismo", tal como se desprendía de aquella novela de Alberto Moravia, que analizó con finura la personalidad de aquellos que siempre estarán del lado del poder porque les gusta vivir a su sombra, recogiendo las migajas que caen y temiendo los efectos que los cambios puedan traer. Ese conformismo se ha trabajado durante décadas y se traduce en miedo al cambio, a casi cualquier cambio.


Egipto sigue sacrificando —física y psíquicamente— a sus hijos rebeldes, a los contestatarios, a los únicos que pueden traer la energía que el país necesita para salir de sus propias dependencias históricas. Ha quedado claro que la contrarrevolución no ha traído cambios para mejor, sino una intensificación de la violencia institucionalizada, desde la Justicia o El-Azhar. Aquellos contra quienes se protestaba por su represión, hoy son celebrados. El "estado" se ha blindado para no desalojar el poder; han aprendido de lo ocurrido con Mubarak. Combina una retórica de populista con los métodos de represión y propaganda más burdos, como el borrar de los libros de textos a aquellos que no quieren que existan. Lo han hecho con Mohamed El-Baradei tal como los islamistas lo hicieron con las mujeres pioneras del feminismo en Egipto. Es la misma mentalidad. Solo una voz debe sonar.
Egyptian Streets recoge una entrevista con el escritor y diplomático Mohamed Tawfik, en la que señala:

"Egyptian writers reflect a feeling that every Egyptian has: That we are so much less than we should be. We should be so much more successful as a nation. Why is it this way? What has gone wrong? Literature is a great tool to explore that.”*****


Pero los libros hay que leerlos. Contestar esas preguntas puede que entre dentro de las funciones críticas de los escritores respecto al tiempo que les toca vivir, pero los lectores pueden reaccionar de muchas maneras ante las críticas. Frente a esos textos, los discursos que les repiten una y otra vez dicen lo contrario, que se va hacia la gloria. Podemos pensar que nos merecemos mucho, el "éxito" pero tenemos solo aquello por lo que luchamos con esfuerzo.
Los que han luchado por tener un poco de libertad se ven acusados de querer destruir el estado con sus manifestaciones y subvertirlo con sus ideas. Ellos son los culpables, los conspiradores. Muchos, los conformistas, aplauden esta persecución. Y seguirán aplaudiendo con la esperanza de que algún día desaparezcan todos y su silencio cómplice pueda ser recompensado. Mientras tanto se seguirán preguntando "¿por qué ha ido mal?". La respuesta la tienen delante, pero no es fácil de ver.


* "Interior minister warns protesters against crossing 'red line' on Sinai Liberation Day" Egypt Independent 24/04/2016 http://www.egyptindependent.com//news/interior-minister-warns-protesters-against-crossing-red-line-sinai-liberation-day
** "Sisi lays flowers for Sinai Liberation Day, vows to protect the State from chaos" Egypt Independent 24/04/2016 http://www.egyptindependent.com//news/sisi-lays-flowers-sinai-liberation-day-vows-protect-state-chaos
*** "Is there any hope left for Egypt’s revolutionaries?" Middle East Centre LEE 17/03/2016 http://blogs.lse.ac.uk/mec/2016/03/17/is-there-any-hope-left-for-egypts-revolutionaries/
**** "‘We are so much less than we should be’: Writer Mohamed Tawfik on Egypt, Literature and More" Egyptian Streets Egyptian Streets 18/04/2016 http://egyptianstreets.com/2016/04/18/we-are-so-much-less-than-we-should-be-writer-mohamed-tawfik-on-egypt-literature-and-more/

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